Mirada a El Salvador: Bukele, díscolo ante EE.UU.

En este artículo: 
Mirada a El Salvador: Bukele, díscolo ante EE.UU.
Fecha de publicación: 
11 Diciembre 2021
0
Imagen: 

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele

Mientras Joe Biden lanzaba su cumbre por una democracia que no se practica en su país, varios de sus asesores se ocupaban en tratar de responder las declaraciones del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, en contra de Washington, no por no haber sido invitado a la pantomima representativa, sino por la intromisión de diplomáticos estadounidenses en los asuntos internos del país centroamericano.

Biden admitió que en esa materia EE.UU. ha retrocedido, y habló de destinar millones de dólares a entidades de reconocida trayectoria injerencista para “ayudar” en ese aspecto a otras naciones, en tanto activistas realizaban un "funeral por la democracia" en las afueras de la sede de la ONU.

Horas antes, en la tarde de este jueves 9, Bukele “tuiteaba”: “Esta claro que los intereses del Gobierno de los Estados Unidos no tienen NADA QUE VER con la democracia, en NINGÚN PAÍS. Da risa que haya personas que piensen que es así”.

Pero antes, el mandatario subrayaba que la "independencia de El Salvador no está a la venta", tras las sanciones económicas contra dos altos funcionarios de El Salvador, porque EE.UU. los acusó sin fundamento –algo ya típico de Washington-- de tratar con entidades delictivas.

Las declaraciones de Bukele fueron hechas al encargado de negocios de Estados Unidos, Brendan O'Brien, quien se encogió de hombros, cuando el mandatario le expresó "nuestra independencia, no está a la venta”, su gobierno “no acepta colaboración, amistad o alianza. Es sometimiento absoluto, o nada. Se ven hasta absurdas esas acusaciones diarias. No sabía que les interesara tanto El Salvador. Tal vez lo que les interesa, es detener el ‘mal ejemplo”.

Reveló que ofreció a O'Brien -quien sustituyó a Jean Manes tras su partida a fines de noviembre- "colaborar (con Estados Unidos) en el combate al narcotráfico y la delincuencia y trabajar para reducir la migración forzada".

Asimismo, Bukele dijo que en la última reunión que sostuvo con Manes, la diplomática le pidió "la liberación" del ex alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, preso por negociaciones con pandillas, y que el fiscal Rodolfo Delgado, elegido por el oficialismo en mayo pasado en el Congreso en reemplazo del destituido Raúl Melara, no fuera reelecto.

También le habría solicitado el compromiso de "no tocar" al ex presidente Alfredo Cristiani (1989-1994) y al ex fiscal Douglas Meléndez, sin mencionar por qué casos.

El Salvador es uno de los ocho países del continente no invitados a la Cumbre por la Democracia convocada para este jueves y viernes por el presidente estadounidense Joe Biden.

Se sabía de antemano que no invitaría a Venezuela, Nicaragua y Cuba, y más cuando nuestro país, según Kamala Harris, la vicepresidenta, seguirá siendo bloqueado, mientras lo quiera la comunidad cubano-estadounidense- controlada por la mafia gusaneril miamense-, y deje de ser “una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos”.

Además, Biden no invitó ni a Bolivia, Guatemala, Haití y Honduras.

POPULARIDAD

Amigos, no tan amigos y enemigos coinciden en admitir que, tras dos años en el poder, Nayib Bukele, un empresario de origen libanés, cuenta con una gran popularidad.

Además de romper el esquema de los dos partidos tradicionales, Bukele obtuvo más del 56% de los votos en el 2919, un año después tenía una polaridad de más del 90% y hoy se estima en un 80%, mientras sus detractores aceptan que tiene la mitad de aceptación.

The New York Times ha utilizado a periodistas opositores salvadoreños para atacar a Bukele, a quien acusan de autocrático y de muy peligroso en el aprovechamiento de su popularidad.

Pero independientemente de estas afirmaciones, no cabe duda de que los ataques a su política han sido endebles, y más cuando es innegable los avances en la salud, la educación, el combate a la pobreza y el aumento de la seguridad.

Se han tejido muchas elucubraciones por sus enemigos, sin conocerse a ciencia cierta si son verdaderas o falsas.

Por ejemplo, se le acusó de entrar con militares al Congreso para imponer su actuación, pero él alegó que era por un problema de seguridad, ya que el legislativo, cuya mayoría logró en posteriores comicios, había sido amenazado.

En este contexto se encuentra que, en un viaje a China, Beijing donó medio millón de vacunas para el combate a la COVD-19, además de firmar un ventajoso contrato que durante mucho tiempo fue detenido por el anterior legislativo, controlado por ARENA, quien también tenía a una gran parte de los jueces a su favor.

Toda esta situación fue tergiversada por organizaciones de derechos humanos adscriptas y pagadas por EE.UU., como Human Right Watch.

Pero, sin dudas, con virtudes o defectos, podemos aprobar o no a quien no se ha referido bien sobre Venezuela ni mencionado a Cuba para nada, que sepamos, al que sus detractores comparan con su colega nicaragüense, Daniel Ortega.

Pero antes, leamos lo que admiten algunos adversarios dentro de la nación:

El expresidente de ARENA Walter Araujo destacó cómo ningún presidente en la historia de El Salvador había logrado estos niveles de aprobación "por quien tiene que decidir si ha hecho una buena o mala gestión: el pueblo salvadoreño".

"El presidente es cuestionado fuera del país, pero la realidad que viven a diario los salvadoreños no es la misma que la que hay fuera de las fronteras", le explica a BBC Mundo sobre este contraste de visiones Dagoberto Gutiérrez, firmante de los Acuerdos de Paz por el FMLN.

"El país viene de un gobierno con un repunte durísimo de homicidios, y de pronto pasan a un mandatario de mano dura, simpático y guapo entre comillas, mediático, con una estrategia de marketing político y que les baja a los homicidios. Ahí está la clave del apoyo en El Salvador", opina Breda Ortega, coordinadora del Diplomado en Migración y Derechos Humanos de la Universidad Nacional de México.

LOGROS

Esto lo dejamos para último, con el fin de poder apreciar lo que Nayib Bukele ha representado hasta este momento para su país, aunque no tenemos cifras exactas,

Plan Control Territorial: es una de las políticas de seguridad más exitosa que ha tenido esta nación, pues el país llegó a sumar casi dos meses sin asesinatos, y aunque en la actualidad ese récord ya se rompió, hay que tomar en cuenta que los índices de inseguridad disminuyeron considerablemente.

Disminución de la pobreza extrema: desde su llegada al poder, Bukele hizo un reacomodo al gasto público que le permitió favorecer a aquellos que se encontraban en niveles de pobreza extrema, disminuyendo esta cifra por primera vez en la historia contemporánea de El Salvador.

Un nuevo salario mínimo: sobra decir que la cifra del salario mínimo es algo que todo el mundo tiene en cuenta en América Latina, por lo que haberlo aumentado al 50% determinó en parte su aumento de popularidad entre las masas.

Un nuevo sistema de salud: era muy común observar en este país el cobro de cuotas voluntarias para poder ser atendido en los hospitales públicos. Con la llegada de Bukele al poder esto se terminó, y con el reacomodo del gasto público también se destinó mayores recursos al sistema de salud, permitiendo bajar los índices de mortandad infantil y materna.

Un giro a la educación: Ante la presencia de grandes comunidades con altos índices de analfabetismo, el gobierno se dio a la tarea de aumentar la matrícula de educandos y disminuir la deserción escolar.

Camino económico: con esta renovación de liderazgo, el mercado internacional ha prestado mayor atención a este país, por lo que las exportaciones aumentaron en casi 40%. Con ello creció el empleo y el flujo de capitales entre la sociedad.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.