Respuesta a El Nuevo Herald

Lo circularon este martes y ofrece una lección sobre el más repugnante periodismo que, por encargo, se pueda ejercer.

Comienza diciendo, a su estilo, sin probarlo, que Nicolás Maduro celebró la violencia que aflige a Ecuador y Chile.

De acuerdo con su punto de vista, se trata de un éxito del Foro izquierdista de São Paulo.

También subrayó que lo sucedido es únicamente el comienzo de lo que está por venir.

Si Delgado fuese honesto, habría añadido: en caso de mantenerse la miseria entre tantos latinoamericanos.

Sin embargo, para él, la agitación social que ha estremecido a Ecuador y Chile es promovida por Cuba y Venezuela.

O sea, la misma tesis que sostienen el Departamento de Estado y sus mucamas en la región.

¿Y quiénes, según el colega Delgado, son los culpables de la rebelión en marcha?

Acciones coordinadas a través de la controversial “alianza de movimientos socialistas”.

Nadie en esta región se había atrevido a calificar de esa manera al Foro. Observadores insisten en puntualizar que en las rebeliones populares de estos días han tomado parte sectores de los más diversos signos.

Incluso llamaron la atención sobre cómo, por ejemplo, el movimiento indígena de Ecuador fue reforzado con la presencia de trabajadores urbanos.

Y más recientemente, fueron las centrales obreras quienes llamaron a la carga contra el impopular régimen de Sebastián Piñera en Chile.

Aún más repugnantes y desesperados han sido mensajes fabricados por fuerzas tenebrosas que intentan brindar credibilidad a sus maquinaciones.

¿Qué dicen algunos textos de los que se hacen eco mercenarios locales?

“El plan va en pleno desarrollo, victorioso. Todas las metas que nos hemos propuesto (...) las estamos cumpliendo una por una”.

Voces disidentes les contestaron:

“Verdaderos culpables son quienes aplican las políticas neoliberales del Fondo Monetario Internacional (FMI)”.

En diálogo con la televisión, el segundo hombre del PSUV, Diosdado Cabello, expresó:

“Nosotros, recientemente, hablamos de una brisa bolivariana. Parece que esa brisa irritó a un gentío. Pero si apenas eso es una brisa, no nos hemos convertido en una ventolera. Y, ay, si nos llegamos a convertir en un huracán que sea capaz de llegar a todos lados”.

Los críticos del Foro de São Paulo, escribió el periodista Antonio María Delgado, lo acusan de incitar proyectos dictatoriales “de corte castrista”.

Su artículo recordó que las declaraciones del régimen fueron emitidas cuando Chile se encuentra bajo Estado de Emergencia decretado por Sebastián Piñera.

Este último advirtió que su país “está en guerra contra un enemigo poderoso, creador de disturbios”, nueva grotesca insinuación contra La Habana y Caracas.

Cifras del Instituto Nacional de Derechos Humanos aseguraron que el número de muertos, heridos y detenidos ha ido aumentando considerablemente.

Según Delgado, en Ecuador, miles de manifestantes sacudieron la capital con actos vandálicos en protesta al subir precios de los combustibles.

Sin embargo, hay muchas más anécdotas, pero basten las anteriores para demostrar la diferencia entre proeza y excrementos.

Por ello, el periodista de El Nuevo Herald Antonio María Delgado ocupa un lugar de honor en el segundo término.