Miguel Angel López, el único titular de la nueva generación del voleibol cubano que aún no juega en Europa, ansía llegar a Liga Italiana, la mejor del mundo, aunque cuando esté en condiciones de ser titular en uno de sus grandes clubes.

“Siempre he tenido el pensamiento de ir a Europa, pero para hacerlo bien, llegar para no hacerlo bien es un error. Primero quiero prepararme, desarrollarme, y entonces llegar a Europa, específicamente la Liga Italiana, la mejor del mundo”, dijo López, una de las revelaciones de la Liga de Brasil con el Sada Cruzeiro.

En una entrevista con el canal de Youtube Cubanspikes, el cubano de 23 años y 1.89m señaló que se ve jugando en Italia en “menos de cinco años”, pero dejó claro que prefiere llegar “en buen estado físico, mental, con buena preparación técnico-táctica y jugar en uno de los cuatro grandes: Lube, Perugia, Piacenza o Trentino.

Ganador de títulos en las principales ligas de Suramérica, Argentina (UPCN) y Brasil (Sada Cruzeiro), López atraviesa por una temporada de ensueño con el Sada, lo que ha despertado el interés de varios clubes.

“Quisiera jugar en un gran club para poder discutir títulos, Copa, Liga, Superliga, Champions, todo lo que pueda”, enfatizó.

A pesar de tener una estatura pequeña para el voleibol moderno, el llamado “cubano volador” se las ingenia para sobresalir en aspectos claves del juego como el servicio y ataque, además de complementar con un muy mejorado trabajo en recepción y defensa.

Actualmente figura en el Equipo Ideal de la Superliga brasileña, con 210 puntos en 57 sets, con 22 aces, apartado en el que es líder.

Además, es segundo en aces por set (0.39), noveno en puntos por set (3.68), decimocuarto en puntos (210), además de exhibir un porciento notable en bloqueo, con 22 efectivos para el puesto 21 en la liga.

Con relación a la selección nacional de Cuba, mostró esperanza en que pueda lograr una buena actuación en los Juegos Olímpicos de París-2024.

“No puedo afirmar que en París vamos a alcanzar una medalla, pero sí tenemos una buena preparación, vamos aumentando el nivel cada día, y cada jugador tiene la expectativa de crecer, creo que podemos hacer un buen papel en París”, consideró.

“Si cada uno se lo propone podemos llegar a París y tener un buen resultado, aunque primero hay que clasificar, porque la clasificación también es dura”, vaticinó.

López pertenece a una talentosa generación en la que destacan figuras como Marlon Yant (Lube), que alcanzó medallas de plata en el mundial sub 21 de Brno y bronce en el sub-23 de Egipto, ambos en 2017.