LA FOTO: Que la guerra no me sea indiferente

especiales

LA FOTO: Que la guerra no me sea indiferente
Fecha de publicación: 
1 Noviembre 2023
0
Imagen principal: 

Foto: Captura de pantalla / YouTube

Es León Gieco cantándole al Papa Francisco su canción más emblemática: Solo le pido a Dios.

La foto fue tomada en mayo último, en Roma, al cierre de una audiencia privada. Pero cuando se vuelve ahora, una vez más, a escuchar ese que se ha vuelto un himno coreado por multitudes, y sobre todo ante la presencia del Sumo Pontífice, una carga nueva de significados le crece a la canción, al ruego:

Solo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente,
es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.

Más que un pedido individual, sigue siendo ahora, quizás más que nunca antes, el coro de millones espantados por el conflicto israelo-palestino; estremecidos de dolor y rabia ante cada foto de un niño que ya no sonreirá más, ante el dolor incrustado en el rostro de quien perdió a todos los que amaba.

Solo le pido a Dios
que el dolor no me sea indiferente,
que la reseca muerte no me encuentre
vacío y solo sin haber hecho lo suficiente.

Así pide Gieco en su canto, compuesto en 1978, y el Papa —que ya se ha pronunciado enfáticamente en contra de esa guerra en el Oriente Medio— escucha reconcentrado, como calibrando cada palabra, y pareciera que imprimiéndole su impulso para que lleguen sin dilación al destinatario.

Pero aunque la canción se vuelva un coro atronador de multitudes, siempre estarán los peores sordos, los que no quieren oír, los que prefieren explosiones a melodías.

De todos modos, la canción continúa vibrando, convirtiéndose, más que en pedido, en un compromiso porque el dolor no nos sea indiferente.
 

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.