Virtuosismo y calidad interpretativa con Vitier

Simbiosis de virtuosismo y calidad interpretativa devino la presentación, en esta ciudad, de la obra Misa Cubana, la más universal del destacado compositor José María Vitier.
   
Interpretada por músicos como el cantautor Augusto Enrique, las solistas Bárbara Llanes y María Felicia Pérez, y el percusionista Abel Acosta, la pieza, deleitó anoche a niños, jóvenes y adultos en el teatro Bayamo, el mayor de la provincia de Granma.
   
Completaron el elenco de lujo la orquesta Solistas de La Habana y el coro Exaudi, todos bajo la dirección del propio Vitier.

Estrenada en 1996, la obra es el resultado de la implicación de los más diversos procesos de la música cubana con un altísimo vuelo y nivel de elaboración en los que se mezclan las letras propias de la liturgia tradicional de una misa con elementos afrocubanos y trovadorescos.

En poco más de una hora trasportó al público a una realidad llena de simbolismo y autenticidad; acompañada por una muestra pictórica itinerante de Silvia Rodríguez, la cual  bebe de los textos en castellano que ella misma compuso para el segmento coral de la Misa.

La presentación forma parte de una gira, iniciada el martes último en el oriente del país, del autor de la banda sonora del filme Fresa y Chocolate,  para celebrar el aniversario 400 del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad de El Cobre, Patrona de Cuba, según la fe cristiana.

En declaraciones a la prensa, José María Vitier destacó que el concierto en Bayamo tiene una significación especial porque en esta ciudad se produjo el primer encuentro fecundo entre el sentimiento religioso y la historia.

Agregó que la intención es llevar esta pieza, objeto de más de 90 interpretaciones en escenarios cubanos e internacionales, al resto del país en el transcurso del año próximo.