Miró Argenter, el subordinado catalán de Maceo

Miró Argenter, el subordinado catalán de Maceo
Fecha de publicación: 
2 Mayo 2022
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José Miró Argenter

El 2 de mayo de 1925 falleció en La Habana José Miró Argenter, periodista y militar que alcanzó el grado de general de división del Ejército Libertador. Fue un alto oficial muy cercano a Antonio Maceo durante la última guerra por la independencia de Cuba. 

Sobre la vida de este mambí y su relación con el Titán de Bronce, Cuba Sí conversó con la historiadora santiaguera Zoe Sosa Borjas, máster por la Universidad de Oriente y miembro de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba, que posee varias investigaciones relacionadas con el tema. 

¿Cuál fue la trayectoria revolucionaria de Miró Argenter? 

El catalán José Miró Argenter llegó a Cuba en 1874 para establecerse en La Habana. Por motivos de salud se trasladó a Santiago de Cuba dos años después, a la zona de San Luis. Llegó a Holguín en 1878,  tras ser condenado por las autoridades españolas al destierro a 100 kilómetros de su residencia. 

Allí continuó sus trabajos periodísticos y presidió el Comité Autonomista de Holguín. Dirigió los periódicos La Doctrina y El Liberal. Fue un conspirador, líder local y colaborador de Maceo desde el territorio oriental. 

¿Cómo conoció a Maceo?

Cuando Maceo iba en busca del navío que lo conduciría a Jamaica fue invitado por el general Arsenio Martínez Campos a un almuerzo de despedida, el 8 de mayo de 1878, en el ingenio Río Grande, San Luis, del que Miró era mayoral. Por su categoría fue invitado a la mesa. Se sentó cerca del héroe de Baraguá.  Surgió entre ambos simpatía mutua. Según algunos biógrafos de Miró, allí contrajo su compromiso con la causa cubana. 
En 1895, tras el desembarco de Maceo, se encontraron en Bijarú, donde le fue reconocido el grado de coronel.

¿Cómo fue su rol frente al Estado Mayor de la columna invasora?

El 1ro de noviembre de 1895 el ya brigadier Miró, al mando de un regimiento, se incorporó a la columna invasora comandada por el general Maceo, en su paso por Holguín. Más tarde fue nombrado jefe del Estado Mayor de ese contingente. Se convirtió en uno de los hombres de confianza de Maceo. Su firma quedó estampada en documentos que marcaron momentos importantes de la vida del prócer y la historia nacional. 
Fue un relator-partícipe de aquella jornada de la insurrección en las comarcas occidentales, donde acopió anécdotas, vivencias y documentos. En su papel de narrador, para lograr mayor veracidad, le dio enfoque informativo a sus testimonios. Estos legaron un caudal revelador sobre las campañas y acciones junto al Titán de Bronce; planes de campaña del Ejército Libertador; las operaciones; el número de fuerzas cubanas y españolas; armamentos, pertrechos, expediciones...  

Tras la caída en combate de Maceo, ¿a qué otros hechos militares estuvo vinculado?

Sintió admiración y cariño por el guerrero. Fue espectador en el funesto episodio de su caída en combate. Apesadumbrado por la muerte de su jefe y amigo, marchó hacia Camagüey con permiso ilimitado para continuar hasta Manzanillo, donde estaba su familia. Hubo poca actividad militar en su vida durante el resto de la guerra. Se dedicó a poner en orden sus apuntes, en lo que lo sorprendió el fin de las hostilidades. 
Alrededor de la muerte de Maceo hubo encendidas polémicas que lo involucraron. Según algunas versiones, huyó despavorido del terreno y en shock emocional tras ser levemente herido.

¿Cuál fue su posición durante las encrucijadas relacionadas con la intervención de Estados Unidos en la guerra y sus consecuencias? 

Miró condenó la intervención y criticó constantemente cómo el verdadero patriotismo andaba sin hogar y esperanza. Decía: “porque el patriotismo hedía a pobre de solemnidad, y cualquier cantor de la gloria de la revolución era un romancero andrajoso sin oficio”. 

¿Cómo fue su labor periodística? 

Fue fundador de la Academia de la Historia de Cuba. Se destacó también en las publicaciones La Democracia y Vida Militar. Se le encargaron los archivos del Ejercito Libertador. Publicó varios textos sobre la guerra, relacionados fundamentalmente con Maceo.

¿Cuál es la trascendencia de sus escritos sobre la guerra?

Miró fue uno de los que más intimó con Maceo. Desempeñó una función de gran importancia: historiar la invasión de Oriente a Occidente. Suyo fue, de 1899, Cuba. Crónicas de la Guerra, primer libro de base testimonial sobre el Titán de Bronce. Su objetivo fue elevar la figura de Maceo entre los héroes independentistas. Esta constituyó, además, la primera obra que puso énfasis en las campañas de Occidente. 
Su obra puede ser defendida o refutada, pero tiene un puesto de honor en la historiografía cubana y maceísta. 

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