Cuando se vive en aparente impunidad…

… es muy fácil denostar y tratar de hacer desaparecer a aquellos que le estorban, como le sucede hoy a los israelíes respecto al pueblo palestino.

Así, ignorante de las numerosas resoluciones dictadas por Naciones Unidas para la creación de dos estados, uno israelí y otro palestino, en la tierra originaria de Palestina, el 67% de los israelíes están en su mayoría a favor de matar a todos los palestinos y un 82% quiere que se les expulse de la Franja de Gaza.

Esta sed de sangre está vinculada a un pasaje bíblico, el relatado en Josué, 6:21 sobre la conquista de Jericó: “Luego consagraron al exterminio todo lo que había en ella, pasando al filo de la espada a hombres y mujeres, niños y ancianos, vacas, ovejas y asnos”. A juicio de una mayoría significativa de israelíes, las Fuerzas Armadas de Israel deberían actuar de igual forma en Gaza, “matando a todos sus habitantes”.

Son cuestiones que no suelen plantearse con esa franqueza en un sondeo sobre el conflicto palestino-israelí, pero en uno reciente muestran una clara radicalización del sionismo religioso y una paulatina aceptación por la sociedad civil de sus postulados. “Los judíos israelíes laicos –dicen en Haarezt– son incapaces de articular una visión que cuestione la supremacía judía”.

Esta tendencia no ha hecho más que subir desde la retirada de Israel de Gaza en el 2005. Uno de los propagandistas más influyentes del concepto de supremacía judía es el rabino Yitzchak Ginsburgh, quien preside la yeshivá Od Yosef Chai, ubicada en el asentamiento israelí de Yitzhar. Hace 20 años, tras el desmantelamiento de las colonias judías de Gaza, pronunció un contundente sermón a las puertas del Parlamento. «Preparó a sus seguidores para la violencia masiva y la limpieza étnica, políticas que, dos décadas después, están desarrollándose en Gaza.

Un ejemplo de esta violencia es la táctica usada por el Ejército israelí en los últimos días: disparar contra la gente hambrienta que acude a los puestos de ayuda humanitaria, lo cual se suma, a la utilización de francotiradores para asesinar a niños, con el fin de evitar que crezcan y puedan vengarse, y de mujeres, para que no puedan procrear.

EL PEOR DE TODOS

Siempre se relata históricamente de lo reaccionario que han sido los gobiernos sionistas, pero este, el actual, es el peor de todos, sin un resquicio de humanidad, y eso lo avalan prestigiosas universidades estadounidenses nada sospechosas de izquierdismo.

El actual es el 37.º gabinete de Israel, formado el 29 de diciembre del 2022, tras las elecciones a la Knéset del 1 de noviembre de 2022, y ha sido ha sido descrito, subrayo, como el gobierno más derechista de la historia de Israel, así como el más religioso.

El gobierno es de coalición, está formado por siete partidos: Likud , Judaísmo Unido de la Torá , Shas , Partido Sionista Religioso , Otzmá Yehudit , Noam y Unidad Nacional , y está dirigido por un reconocido criminal, Benjamín Netanyahu.

Varios periodistas y grupos de derechos humanos nada sospechosos de progresistas afirman que la ideología que defiende la extrema derecha israelí es fascista y racista hacia los palestinos, los ciudadanos árabes de Israel y los inmigrantes. La consideran un peligro para la democracia y afirman que utiliza la violencia y fomenta la violación de los derechos humanos.

Hasta el anterior presidente de Estados Unidos, Joe Biden, un sionista confeso, admitió que el gobierno de Benjamin Netanyahu incluía a algunos de los miembros más extremistas que jamás había visto.

En el 2023, la coalición liderada por el Likud fue descrita en términos autoritarios por el periódico progresista  israelí Haaretz , como " fascista " y "una dictadura".

FECHORÍAS

En el 2023 y el 2024, el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, inició al menos cuatro marchas hacia el complejo de Al-Aqsa en Jerusalén Este, cada una con hasta mil colonos israelíes ultranacionalistas, toda una provocación.

El 26 de febrero del 2023, en represalia por el tiroteo de dos colonos israelíes ocurrido ese mismo día por un atacante no identificado, cientos de colonos israelíes llevaron a cabo una violenta masacre nocturna en Huwara y otras aldeas palestinas en la Cisjordania ocupada, dejando una ciudad en llamas, mientras los soldados que estaban en la zona no intervenían y el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich , político de extrema derecha y en parte responsable de la administración de Cisjordania, pidió que el ejército "aniquilara" Huwara.

Pero esto es solo un “pasaje” del espíritu criminal de los integrantes del gabinete sionista.

El ministro de Agricultura, Avi Dichter ( Likud ), dijo al Canal 12 israelí en noviembre del 2023 que la guerra sería la " Nakba de Gaza ", utilizando la palabra árabe para "catástrofe" que muchos usan para describir el desplazamiento en 1948 de aproximadamente 700 000 palestinos.

El ministro de Patrimonio, Amihai Eliyahu ( Otzma Yehudit ), declaró en una entrevista en noviembre del 2023 que el lanzamiento de una bomba nuclear sobre la Franja de Gaza era "una de las posibilidades".

El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich ( Partido Religioso Nacional-Sionismo Religioso ), declaró en una carta de noviembre del 2023 que los palestinos deberían ser excluidos de las "zonas de seguridad" en la Cisjordania ocupada, incluso para "cosechar aceitunas". También pidió la creación de "zonas de seguridad estériles" alrededor de los asentamientos en Cisjordania para "impedir la entrada de árabes".

Quizás lo más cruel lo exhibió sin tapujos La ministra para el Avance de la Mujer, May Golan ( Likud ), quien dijo en un discurso en febrero del 2024: "Estoy personalmente orgullosa de las ruinas de Gaza, y de que cada bebé, incluso dentro de 80 años, le contará a sus nietos lo que hicieron los judíos".