ZONA CRÍTICA: Animación, más allá de Juan Padrón
Habría que definir los desafíos, los obstáculos y las realizaciones de la animación audiovisual en Cuba. Porque el panorama es amplio: animados realizados por niños, gracias a los talleres que ofrecen algunas instituciones y grupos, hasta la producción profesional, concebida para los niños y también para los adultos. Algo ha quedado claro: es necesario ahondar en algunas aristas de este tema, pues en no pocas hay dinámicas, conflictos y perspectivas que ameritarían un debate específico.
La formación de los animadores sería una. Si se cuenta en Cuba con una tradición (y se ha mencionado, por ejemplo, la impronta del gran Juan Padrón, que no ha sido el único), si se cuenta con una tradición, es significativo que no se cuente con una escuela, con una academia, aunque los Estudios de Animación del ICAIC representen un referente para la creación.
Pero es necesario formalizar estudios de animación, asumiendo especializaciones, en las escuelas de cine en Cuba. El empirismo no debería ser el único camino. Y los talleres, y los grupos de creación... podrían ser cantera.
Otro tema, que es particularmente complejo, pues trasciende muchas veces las posibilidades de las instituciones y los creadores: la renovación tecnológica. Es difícil marchar con el mundo en ese sentido porque este es un país pobre... y bloqueado (el bloqueo no es un lugar común o mera justificación, como pudiera parecerles a algunos). Hay restricciones específicas para el uso de cierta tecnología... y faltan fondos para acceder a otra. La respuesta (que, por supuesto, no es la única) es la creatividad y el empeño. Pero hay que seguir explorando alternativas.
De cualquier forma no se debe confundir tecnología con arte. Una cosa es la herramienta y otra lo que se puede hacer con esa herramienta.
Y eso conecta con otro tema: los valores estéticos, conceptuales de lo que se realiza. Este un asunto de meridiana importancia, y no se resuelve con el pleno acceso a la tecnología. Hace falta cultura. Información. Y no faltara más, talento. Hay carencias en la factura que tienen que ver más con el gusto y la capacidad de los realizadores, que con los programas con los que trabajan.
Y esto tiene que ver también con la formación, así que volvemos al principio. Es preciso romper ese círculo.
Una versión de este comentario se transmitió en el Noticiero Cultural de la Televisión Cubana.
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Juan Carlos Subiaut Suárez
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