Sistema de Comercio atiende a damnificados por accidente en el Saratoga

Betsy Díaz Velázquez, ministra de Comercio Interior (MINCIN), declaró hoy que el comercio de la capital brindó rápida respuesta a las familias damnificadas, cuyas viviendas cercanas al hotel Saratoga quedaron destruidas o severamente dañadas.

   En el espacio Mesa Redonda ahondó que se han asegurado los recursos básicos, como algunas prendas de ropa, aseo y módulos de inducción con el propósito de que tengan soberanía en la cocción de alimentos.

   Informó que continuará el aseguramiento desde el comercio a esas familias capitalinas por lo delicado de la situación.

   La atención a los afectados tras la explosión del pasado viernes en La Habana Vieja forma parte de la política del país, que ejecuta el MINCIN para dotar de artículos y productos a aquellos que pierden sus bienes en algún evento extraño o desastre.

   Sobre el proceso de transformación que emprenden desde 2019 explicó que el mayor objetivo es rediseñar la actividad y dotar de autonomía a las unidades.

   En medio de las limitaciones, se demuestra que el cambio sí es posible cuando el colectivo laboral y su líder trabajan en ello, se aprecian los resultados y la población sale beneficiada, acotó.

   Destacó que el programa de recuperación de las bodegas coincide con los barrios en transformación y estos establecimientos, en muchos casos, han incorporado la venta de otros productos de primera necesidad y fabricados en minindustrias, a fin de acercar el comercio a la comunidad.

   La titular manifestó que una de las cuentas pendientes es aplicar la innovación y extender la digitalización de las unidades, proceso por el que más de ocho mil 700 bodegas emplean el pago a través del código QR, cuyas operaciones crecen cada día.

    Mencionó además que los establecimientos de comercio juegan un papel fundamental en el servicio Caja Extra, que permite en zonas alejadas de cajeros automáticos extraer efectivo a partir de los ingresos percibidos en las ventas diarias.

  Señaló que avanzan, aunque no como corresponde, en la informatización de las Oficodas (registro de consumidores), con el 17 por ciento de los núcleos incorporados, en tanto los 195 establecimientos que permiten las ventas a plazos bridan una nueva opción para adquirir determinados artículos, si bien sus precios no son aún los que se aspiran, subrayó.

   Díaz Velázquez precisó que por la Resolución 96 entregaron tarjetas temporales (libretas) a más de 60 mil núcleos y en la actualidad, con la normativa fuera de vigor, se despachan a personas con niños y otros casos particulares, de manera excepcional.

   Sobre la gastronomía, expresó que son más de 500 las unidades empresariales de base con autonomía en su gestión y más del 70 por ciento ostenta niveles de satisfacción deseados.

Estamos convencidos de que es un modelo eficiente, existe un cronograma y un seguimiento constante para transformar las unidades en las que aún no se logran las mejoras, subrayó.