¿Sexagenarios o sexalescentes?
especiales
Foto: tomada de amec.uy
No es todavía un término muy común en el habla cotidiana, pero de la sexalescencia se habla hace más de una década.
Ya en el 2012, se referían al asunto como “ese tramo de la edad de personas que trabajaron en un largo periodo de su existencia pero que ahora, una vez jubiladas, disfrutan plenamente de la vida y han colocado un valladar ante sí que repele el miedo al ocio y a la soledad. La sexalescencia que abomina del concepto un tanto sombrío de sexagenario disfruta de su situación…”
Con el paso del tiempo, la definición ha cobrado más colores, arriesgándose a asegurar que es algo así como una segunda adolescencia que arranca a los 60 años.
Foto: tomada de eldesconcierto.com
Suena muy bonito, sería magnífico que así aconteciera de verdad en todas partes. Pero… una cosa es con guitarra y otra con violín. Y si olvidas matices, contextos, te alejas de la realidad.
Quienes hoy echan mano al adjetivo de sexalescentes, lo hacen mencionándolo como tendencia, aludiendo a los adultos mayores de 60 años que experimentan esa etapa de la vida de un modo diferente a lo que tradicionalmente se ha entendido por vejez, tercera edad, adultos mayores o como quiera llamársele.
Algunos aseguran –aunque no ha sido posible encontrar una corroboración científica- que el término fue acuñado por el abogado ecuatoriano Manuel Posso Zumárraga, quien apunta que se trata de una generación de adultos mayores de 60 años que están redefiniendo lo que significa envejecer.
Foto: tomada de abc.es
No faltan quienes se lanzan a sentenciar que tal término “es una verdadera novedad demográfica -y lingüística- parecida a lo que fue en su momento el surgimiento de la palabra adolescencia”.
¿Novedad demográfica para quiénes, dónde?
Intentando hacer un compendio de las características que distinguen a los sexalescentes, podría resumirse que:
-Manejan la tecnología con facilidad, comunicándose con sus seres queridos a distancia y disfrutando de su independencia emocional.
-No buscan la juventud eterna en la apariencia física, sino que valoran la sabiduría y la experiencia compartida.
-Recuerdan su juventud sin nostalgia y celebran cada nuevo día haciendo planes para sí mismos y no para otros con una tenacidad, audacia y vitalidad.
Foto: Shutterstock
- Muchos siguen trabajando. Bien porque aún no se han jubilado, o porque les gusta trabajar de manera independiente, en una ocupación que les da placer y conocen. También los hay que inician estudios por el mero disfrute de aprender.
-Practican deportes, viajes y emprendimientos desde la creatividad y la alegría de vivir, sabiéndose autosuficientes en todos los sentidos.
Bien vale la pena revisar algunos datos demográficos a nivel mundial para entender hasta qué punto la sexalescencia puede ser comprendida como una tendencia significativa a nivel global, sobre todo, considerando que para cumplir con tal definición hace falta contar con una buena salud física, mental y también financiera, así como con un contexto familiar, comunitario y en general socioeconómico, que sirva de respaldo a esa plenitud.
De acuerdo con el Fondo de Población de Naciones Unidas (FNUAP) y su Informe sobre el Estado de la Población Mundial 2024 de los 8 mil millones que habitan el planeta, los mayores de 65 años son un 10%, con una esperanza de vida al nacer de 71 años para los hombres y 76 para las mujeres. En 2030, una de cada seis personas en el mundo tendrá 60 años o más.
Infografía: FNUAP
De ese total de ancianos, cerca de 800 millones, es decir, aproximadamente uno de cada seis, sufren malos tratos, a veces por parte de sus cuidadores; alrededor del 14% de los mayores de 60 años viven con un trastorno mental, a la vez que dichos trastornos representan el 10,6% de la discapacidad total entre los adultos mayores.
A lo anterior se agrega que, a nivel mundial, alrededor de una cuarta parte de las muertes por suicidio (27,2%) se producen en personas de 60 años o más.
Son datos aportados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su sitio oficial, a finales de octubre último.
Es así que la sexalescencia no parece ser característica de grandes mayorías. No es lo mismo envejecer en Noruega que en Burundi; en Alemania que en Haití.
Foto: tomada de cuartoscuro.com
La calidad de vida de los ancianos en América Latina y el Caribe es un tema complejo, afectado por condicionamientos que abarcan la salud, la economía, la educación y la seguridad social, entre otros. En general, no viven esta última etapa de la vida como lo hacen sus coetáneos de países desarrollados.
Alrededor del 13% de las personas mayores en nuestra región requiere las atenciones de un cuidador o cuidadora y es que entre los factores que conspiran contra la calidad de vida de estos adultos mayores se apuntan también la pobreza, la falta de acceso a la atención médica, la discriminación, la violencia... Y muchos ancianos en esta área geográfica viven en la pobreza, sin acceso a los servicios básicos que necesitan para llevar una vida digna.
Datos seleccionados aleatoriamente ejemplifican lo anterior:
-Solo dos de cada 10 adultos mayores tienen acceso a una pensión en Colombia y 18 millones están en condición de pobreza monetaria.
-El año pasado en Argentina la pobreza de adultos mayores aumentó 3,1 puntos y afectó a más de 960 mil personas.
- El 75% de la población de adultos mayores en Honduras se encuentran en condición de pobreza. Del total, 3 de cada 10 se encuentran en situación de pobreza extrema y 7 de cada 10 además de vivir en condición de pobreza, sufren de alguna enfermedad crónica.
- En Costa Rica calculan que un 27% de los mayores de 65 años vive en condiciones de pobreza y un 40% no tiene acceso a una pensión.
Mujeres salvadoreñas de la tercera edad en una zona rural. Foto: Emerson Flores.
-Una de cada 4 mujeres mayores de 60 años en El Salvador es impactada por la precariedad y la discriminación, sobre todo en áreas rurales.
-Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el 34,5% de las personas mayores de 65 años no tienen ingresos en América Latina y el Caribe debido a un deterioro de la cobertura de protección social para la vejez. Esta brecha de cobertura es la mayor desde el año 2012, destaca una nota técnica publicada el año pasado por la Oficina Regional de la OIT para América Latina y el Caribe.
Vistas así las cosas, es difícil hablar de sexalescencia sin hacer importantes precisiones y abundar en los detalles aun cuando el aumento del número y la proporción de personas mayores sea tendencia a nivel mundial.
Cambio de enfoque
No obstante, sí han tenido lugar novedades en este tema y “El envejecimiento de la población está a punto de convertirse en una de las transformaciones sociales más significativas del siglo XXI, con consecuencias para casi todos los sectores de la sociedad, entre ellos, el mercado laboral y financiero, la demanda de bienes y servicios, como la vivienda, el transporte y la protección social, así como la estructura familiar y los vínculos intergeneracionales”, según se asegura en el sitio oficial de la ONU.
A pesar de las notables diferencias, “Las personas mayores son vistas cada vez más como agentes que contribuyen al desarrollo, cuya capacidad para actuar en su propio beneficio y en el de sus sociedades debe integrarse en las políticas y programas a todos los niveles. En las próximas décadas, es muy probable que muchos países se enfrenten a presiones fiscales y políticas en relación con los sistemas públicos de asistencia sanitaria, pensiones y protección social para una población de edad cada vez más avanzada”.
Empleo plateado se denomina a la ocupación laboral de los adultos mayores. Foto: tomada de perusindical.wordpress.com
Tanto es así que hasta viene planteándose retrasar la edad de inicio de la vejez dado, incluso por la autopercepción de los propios adultos mayores. “Hay una tendencia histórica sorprendentemente sólida hacia un aplazamiento o un comienzo subjetivo más tardío de la vejez”, afirma desde la Universidad de Humboldt, en Berlín, el psicólogo Markus Wettstein, autor principal de un interesante estudio en este sentido.
Y a pesar de que no parece exacto hablar de una sexalescencia sin hacer distinciones, vale también apuntar que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) informa de avances en políticas y acciones para fomentar el envejecimiento saludable en la región, a pesar de lo descrito y de los retos que el mundo anda hoy enfrentando.
En su informe sobre progresos en el año pasado dentro de los esfuerzos para una Década del Envejecimiento Saludable (2021-2030) destaca que el 91% de los países que reportaron datos de las Américas cuenta con una política nacional en envejecimiento; en tanto casi el 70% cuenta con mecanismos de promoción y protección de los derechos de las personas mayores.
Foto: WordPress.com
Dentro de la iniciativa de colaboración mundial que entraña la Década del Envejecimiento Saludable destacan los esfuerzos por combatir el edadismo, que no son sino las actitudes y conductas negativas con respecto a la tercera edad, condicionadas por estereotipos y prejuicios.
La proyección de una parte de los adultos mayores demuestra que el edadismo es una sobran prejuicios. Foto: pinterest.com
Incluso, aunque la autopercepción ha ido variando, como arriba se indicaba, también el edadismo se puede manifestar desde el propio anciano con respecto a sí mismo.
No es solo un asunto que se queda en el ámbito de los subjetivo, impacta sobre comportamientos relacionados con la salud, el rendimiento físico y cognitivo y la longevidad de la persona. También encuentra eco en políticas y programas de sectores como la educación marginando a las personas mayores en sus comunidades a la vez que puede reducir el acceso a diversos y necesarios servicios.
¿Sexalescentes en Cuba?
El solo formular la pregunta es arriesgado porque la realidad de los ancianos en Cuba conforma un caleidoscopio con tonos tan coloridos como sombríos que implican a los cerca de 2 millones 478 mil 87 mayores de 60 años que habitan en esta Isla, según datos del pasado año.
En su más reciente informe El Envejecimiento de la Población. Cuba y sus territorios, edición de mayo 2023, la ONEI subraya que el envejecimiento poblacional es el principal reto demográfico para Cuba.
Infografía: Cubadebate
Pero aun cuando se trata de un reto, entendidos aseguran que no debe verse desde un prisma negativo ya que las actuales cifras son resultado del desarrollo sociodemográfico de los cubanos y abundan las estrategias gubernamentales que toman cartas en este asunto.
Tanto es así que en la reciente reunión de la Comisión Gubernamental para la atención a la dinámica demográfica,de febrero último, se insistió en lo necesario de una mirada profunda e integral a la atención al adulto mayor, único grupo poblacional que crece en los últimos años.
Foto: tomada de granma.cu
Y es que entender y atender la situación demográfica que nos marca demanda de un cambio de mentalidad, como instaba en esa reunión el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
Las carencias materiales y financieras, aguzadas por el bloqueo del gobierno de EE.UU., transversalizan hoy cualquier empeño en la Isla, incluyendo los referidos a las cuestiones demográficas, pero Marrero Cruz también ha convocado a analizar de modo exhaustivo “las causas de los incumplimientos en programas e indicadores de mayor impacto en la población, a la vez que exhortaba a desplegar estrategias a nivel territorial y local.
Si todo anduviera sobre ruedas no fueran estas las exhortaciones y sería fácil responder que sí, que aquí abundan los sexalescentes.
Es cierto que no pocas personas de la tercera edad se mantienen bien activas, incluso incorporadas aun o reincorporadas al escenario laboral en sus diferentes variantes y no pocos han logrado un buen dominio de las tecnologías que incluso les facilita el teletrabajo.
Foto: tomada del Facebook de la Sociedad Cubana de Psicología
También es verdad que se les ve en parques y otros espacios públicos haciendo ejercicios, que muchos gozan de autovalidismo, y ahora, probablemente más que nunca antes, se han convertido en importante puntal de las familias para la solución de los problemas cotidianos, pero esto último, ¿a qué precio para su salud y sorteando cuántos riesgos?
No puede soslayarse tampoco cuánto el fenómeno migratorio que hoy tiene lugar en el país impacta en los cubanos de la tercera edad, de los cuales una parte ha sido golpeada por la soledad y el alejamiento de seres queridos.
Imagen ilustrativa. Foto: Internet
La cotidianidad, cuya descripción es innecesaria porque todos somos sus protagonistas, habla por sí sola de que eso de la sexalescencia, con la total plenitud y disfrutes que entraña, es para los cubanos de la tercera edad una meta aun por alcanzar.
Añadir nuevo comentario