Los Oscar, infectados
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En un mundo del espectáculo radicalmente cambiado por la pandemia del coronavirus, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood está seriamente evaluando la posibilidad de postergar la velada de los Oscar, prevista hasta ahora para el 28 de febrero próximo.
Lo aseguraron varias fuentes citadas por Variety, que sostienen que en las actuales condiciones y ante la imposibilidad de realizar estrenos cinematográficos, es muy difícil llevar a cabo la principal ceremonia de la industria del entretenimiento. Si bien todavía no hay planes concretos, una fuente bien informada confirmó que "es probable que la ceremonia sea postergada", y que se están evaluando nuevas fechas.
Semanas atrás, al anunciar nuevas reglas temporales para las candidaturas a los Oscar 2021, el presidente de la academia David Rubin dijo a Variety que era demasiado pronto para saber cuanto cambiaría la velada a la luz del avance de la epidemia.
"Es imposible prever hoy cual será el panorama. Sabemos que queremos celebrar los filmes, pero no sabemos todavía bien de qué manera", indicó Rubin.
No es solamente una cuestión de seguridad para las cientos de estrellas que cada año dan vida a la ceremonia en el Dolby Theater, que transmite en directo para todo el mundo la cadena ABC News en un negocio multimillonario.
Una versión indica que otra posibilidad es que la ceremonia podía llevarse a cabo sin la tradicional Red Carpet (el arribo de las estrellas de la industria a la sala) y con un teatro vacío.
Pero el principal problema es la carencia de sustancia, es decir, las pocas películas que hasta ahora fueron estrenadas, y sin un panorama claro de cuando podrán volver a abrir las salas cinematográficas.
Mientras que muchas películas quedaron a la espera de ser estrenadas, entre ellas la nueva de James Bond y la continuación de la saga de Wonder Woman, una gran cantidad de producciones terminaron en la basura y ni siquiera comenzaron el rodaje.
Desde mediados de marzo pasado, los cines de Estados Unidos y de gran parte del mundo están cerrados, lo que obligó a los estudios a postergar sus proyectos y sus planes de distribución.
La actual situación de pandemia y encierro provocó, al mismo tiempo, un aumento superlativo del streaming.
Según Variety, un 70% más de espectadores estadounidenses le dieron la bienvenida además al sistema del pay-per-view y al streaming con respecto a un año atrás.
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