ENTREVISTA: Leonardo Benítez, fuerza, amor y alma en cada personaje

ENTREVISTA: Leonardo Benítez, fuerza, amor y alma en cada personaje
Fecha de publicación: 
29 Diciembre 2021
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Hace rato que Leonardo Benítez nos viene dando motivos para una entrevista, pero el pretexto, o la oportunidad, fue su participación en la recién estrenada telenovela , que dirigió Lester Hamlet, así que por ahí comenzamos la conversación:

«Primero que todo, te voy a decir que yo no era el actor que estaba para esta novela, era otro colega muy querido, amigo mío y muy buen actor además, entonces Lester me llama un lunes por teléfono y me hace la propuesta, yo le dije que tenía que conveniar con otro proyecto que estaba haciendo, que tenía que sentarme a analizarlo, que le daría una respuesta. Esa noche le dije que sí, fui el martes a recoger los guiones y el jueves empecé a grabar.

«Yo no tuve la preparación, como los otros actores, de leerse el guion con bastante antelación; yo tuve todo el tiempo que sentarme con la asesora para que ella me explicara el antes y el después, de dónde venía, para dónde iba, pues yo no tuve el tiempo necesario para leer la novela, además, porque estaba en otros proyectos. Fue difícil en ese sentido, pero Lester me ayudó muchísimo por su comodidad a la hora de dirigir a un actor, ya que nos da mucha libertad».

—¿Y cómo fue entonces ese primer día de rodaje?

—El primer día de rodaje me enfrenté a la escena más difícil o una de las más difíciles, porque realmente este personaje tiene muchas catarsis; es un personaje con una amplia gama de colores, muy extensa, un registro muy amplio. He tenido oportunidad de hacer cosas así en mis 21 años de carrera, pero no un personaje de una novela de principio a fin. Lo he hecho en una película donde, por ejemplo, tengo una escena muy fuerte, pero es una escena; en un telefilme, pero aquí son casi 60 capítulos.

«Realmente fue muy bueno para mí. Llevo mucho tiempo haciendo Tras la huella, y a veces uno necesita que la gente vea algo más, no solo el policía, sino algo más humano, y entonces hacer esta novela fue un regalo y fue también una inyección para asumir Tras la huella con más fuerza, y qué bueno que Lester pensó en mí, lo voy a agradecer toda la vida».

Justamente quería preguntarte sobre Julio, el personaje que tienes en el elenco de Tras la huella.

—Yo venía desde el 2007 haciendo roles negativos, hice siete casos en 11 años. La gente piensa que yo hice mucho más, pero no, lo que pasa es que fueron personajes que marcaron mucho en el televidente. Luego me llamaron para hacer este oficial operativo. Es una persona real mi personaje. Lo escribió Iris Pérez, la actriz, que también es guionista de Tras la huella. Me dio todas las características, incluso hasta cómo el hombre caminaba, todo. Ya después yo le fui aportando otras particularidades al personaje para sacarlo un poco del policía. El policía es a lo que él se dedica, es su labor, pero hay que ver cómo piensa, cuál es la psicología de ese hombre... Eso es lo que hace rico a un personaje, porque puede ser un policía, un médico, un abogado, lo que sea, pero ¿cómo es este hombre?, y es un poco lo que le he tratado de dar a Julio. 

—En ocasiones hay hasta un poco de picardía en el personaje...

—También los guionistas, a raíz de la novela Latidos compartidos, donde hice Maykel Yunior, que fue un personaje que gustó tanto y la gente lo denominó como un galán negro, pues entonces han escrito escenas de Tras la huella en las que, por ejemplo, voy a entrevistar a una muchacha y me empieza a mirar o a meterse conmigo, y eso le da otro color incluso al policiaco, refresca un poquito...

«Estoy muy contento, es un personaje que te da mucha popularidad. La gente ama con locura el espacio Tras la huella, la gente lo espera, tiene ratings altísimos, incluso con capítulos repetidos. Ya empezó la temporada nueva, pero con las retransmisiones mantenía la audiencia, y yo me siento contento al pertenecer al espacio, al estar ahí, pero siempre con el deseo de que mejore cada vez más. No me conformo con la popularidad que tiene, pienso que necesita mejorar en calidad, usar otras cámaras, otros formatos, y sé que eso lleva inversión, pero pienso que el pueblo cubano merece un policiaco mucho más vistoso».

—¿Cuál es tu personaje más querido?

—Para mí es entrañable un cuento que hice con Pedro Luis Rodríguez, el hijo de Magda González, que se llamaba Salvando al General. Era el personaje protagonista, es la historia de un soldado raso que tiene que entregar un mensaje a Vicente García diciendo dónde está escondido Antonio Maceo. Esa es la trama de la historia y para mí eso es algo muy grande.

«Maykel Yunior me trae, por ejemplo, que ya voy por once personas que me he encontrado aquí en La Habana que le han puesto a su hijo Maykel Yunior por mi personaje, y eso es una emoción muy grande. Hoy en día, han pasado seis años y la gente me recuerda todavía, es algo que se quedó, algo muy bonito que siempre voy a agradecer. Fue un personaje que me lanzó a la popularidad».

—De hecho, creo que fuiste el primer galán protagonista negro en una telenovela cubana.

—A veces lamentamos que en telenovelas no haya presencia de actores y actrices negras, y es lamentable porque este es un país lleno de negros y mulatos.


 
—¿Esperas la misma aceptación para el personaje que tienes en ?

—Espero mucho también de este personaje, Tomás se llama. Es un personaje muy difícil, muy duro, que navega por casi todas las emociones. Es una pareja interracial también con Ivette (May Reguera), y espero que la gente lo reciba muy bien. Es una historia colateral ahí con la principal, pero el personaje está de campana a campana, toda la novela. Es un personaje grande, grandísimo.

—¿Cómo ha sido tu experiencia con el cine?

—Es lo que más he hecho en mi vida. Empecé por la película Roble de olor, que fue en el año 2002; luego vino Mañana, y debo tener ya como 15 o 16. El cine es lo que más amo. Luego viene el teatro y luego la televisión. De hecho, he rechazado telenovelas, unas cuantas, porque he estado haciendo cine o he tenido una propuesta en el cine y sé que me va a coincidir. De las cinco novelas que me han propuesto, solamente he podido hacer dos, Latidos compartidos y esta; a las otras he dicho que no porque he preferido hacer cine.

—¿En qué proyectos te encuentras inmerso ahora?

—A pesar de todo, este ha sido un año súper bueno para mí en cuanto al trabajo. Estoy en una película que dirige Omar Alí, y también en otra de Lester Hamlet que se llama Zoe.

—¿Qué nos puedes adelantar de Zoe?

—Mi personaje aquí es un coreógrafo, director de una compañía de baile. Lester es un cineasta excelente, así que cuando me llamó, enseguida le dije que sí. Tuve que montar coreografías, cantar...

—También en la novela...

—Sí, ahí canto dos canciones, pero a mí sí me encanta cantar, yo estoy fascinado.

—¿Y de qué va el otro filme en el que estás trabajando?

—La otra película se llama El camino y la dirige Omar Alí. Es sobre los jóvenes. Estoy feliz y contento. Mi personaje es un sanitario angolano, tengo que hablar en portugués y, ya te digo, estoy muy feliz... Recientemente, hice otra con Elena Palacios que se llama Demonios en la almohada. Estas son películas producidas por el ICRT, pero con los estándares y la estética del cine. A pesar de la COVID, ha sido un año maravilloso lleno de trabajo.

—¿Qué te enamora de un personaje?

—Mira, yo vivo para esto, vivo de esto y sin esto no tengo vida. Si el personaje tiene algo interesante que decir, si la gente puede reflexionar con él, ya es un plus. Ha habido personajes que he rechazado porque no son interesantes, porque no tienen nada que decir, porque su discurso no es bonito, porque la gente no va a reflexionar con ellos, entonces tendría que venir yo a reconstruir, pero todos los directores no dejan que uno reconstruya. 

«Yo rechacé una película, Kangamba... Fíjate, aquí fue al revés, la rechacé por hacer televisión, un teleplay con Elena Palacios que se llamaba Cuéntame, poeta. Yo hacía un jinetero en ese telefilme. ¿Por qué rechacé Kangamba? Porque era un soldado, un militar, venía más o menos presentando la psicología de otros personajes anteriores y yo dije: no quiero repetirme en esto. La gente no entendía mi decisión, me decían: ¿cómo vas a dejar una película por un teleplay? Y yo lo hice, aunque perdiera en cuanto al pago incluso, era una diferencia abismal, pero me chocaban las dos y escogí por amor. Ese soy yo, soy un loco...»

—¿Qué personaje te falta por hacer, con cuál sueñas?

—Yo he hecho muchas cosas, personajes con distintas psicologías, y lo que quiero es seguir trabajando. Yo le pongo tanta fuerza, tanto amor y tanta alma a todo lo que hago, que para mí ninguno es mejor que otro. Yo no estoy esperando algo, lo que estoy esperando es seguir trabajando, no parar y que vengan más proyectos interesantes.

Comentarios

Realmente es un excelente actor. Sus personajes hacen que le cojas odio o cariño con la misma intensidad. Tiene muchísima razón con respecto a los actores negros. de hecho me gustaría ver una novela o un filme actual donde la mayoría de los personajes sean negros, mulatos. A mi me gustaría ver, por ejemplo, una novela sin los tri-temas y donde se vea el caso de los blancos en un barrio de negros. De eso tenemos en Cuba un montón. Pero en definitiva, muchas felicidades a Leonardo Benitez. Espero seguir viendo muchos personajes y tan variados como he podido ver de él.
alexander@ipk.sld.cu

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