DE LA HISTORIA DEPORTIVA: Anton Geesik causa duelo nacional en Japón en 1964
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El judo llegó por primera vez a las citas olímpicas en Tokio 1964. En realidad, como deporte agregado por el gusto la nación albergadora. Volverá en Munich 1972. Los representantes de la sede se pusieron las bo..., digo los kimonos, dispuestos a arrasar en su disciplina preferida, entrenaron y presentaron un conjunto magnífico. Se han preparado para elevar un canto extraordinario. Iremos de los sueños a los hechos.
¡Jajime ¡En la final de los 73 kilogramos se enfrentan el suizo Eric Hanni con Takehide Nakatani. Tiene calidad el europeo, se lanza y choca con una muralla. Al menos sube al peldaño de plata. El doblete de la URSS: Oleg Stepanov y Aron Bogulovov, lo más que puede hacer, a pesar de sus condiciones, es ocupar la tercera plaza.
Hacia los 90 kilogramos: el forzudo germano Wolfgang Hoffman tiene enfrente a Isao Okano. Dura lucha. El de la sede impone al final la técnica sabrosa que posee: ipponea y gana el cetro. Broncean sus anhelos James Brogman y Kim Hi Tae, de EE.UU. y Corea del Sur respectivamente,
En el peso máximo sobresale el nipón Isao Inokuma, potente, resistente, técnico, ágil. El canadiense Alfred Rogers trata de...Ni hablar: tiene que contentarse con el segundo puesto. Los soviéticos enviaron a dos buenos contendientes: Anzor Kiknadse y Parnaoz Chikwiladze: deben conformarse con sendas preseas de bronce.
Queda por definir la categoría libre: A la pelea decisiva arriba el holandés Anthonius Johannes Geesik. No es un improvisado y hasta la finalísima no lo trajo la buena suerte ni el resbalón de algún opositor. Ha sido el primer no japonés conquistador de la corona del mundo en este arte marcial cuando se impuso en el certamen de 1961. Ha demostrado aquí una forma física admirable y un dominio técnico tremendo. ¡Cuidado...! Le puede aguar la fiesta al escenario de los XVIII Juegos. Y se la empapa: doblega a Akio Kuminaga.
Hay duelo nacional en el país del sol naciente a pesar de sus tantas victorias; de suma importancia la alcanzada por la calidad organizativa del certamen Están sus logros. En el propio judo demostraron ser los mejores. Sin embargo, siente más humillación que revés en el resultado final de la lid libre en tan amado deporte. Mientras a Anton Geesik lo reciben en Holanda como un héroe nacional.
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