Encabezados por el campeón olímpico de Tokio 2020 en 60 kilogramos, Luis Orta, quien esta vez se coronó en su nueva división de 67, los representantes de la mayor de las Antillas terminaron el certamen sin la sombra de un revés.

El más complicado fue Gabriel Rosillo, quien tuvo que sacar el extra para imponerse al dominicano Carlos Adames en los 97 kilos.

Rosillo, campeón mundial juvenil de 2019, fue sorprendido por un contraataque de cuatro puntos del quisqueyano.

Así finalizó el primer tramo del combate, pero en el segundo el antillano aplicó la misma fórmula para ganar definitivamente por pegada.

También exigente fue el combate por el oro para el jovencito Kevin de Armas, que vino de atrás y se impuso 4-3 al mexicano Samuel Gurría en los 60.

Mucho menos compleja fue la labor para los otros campeones: Yosvany Peña (77 kilos), Daniel Gregorich (87) y Oscar Pino (130), quienes lograron repetir el escobazo firmado por Cuba en todas las ediciones hasta Maracaibo 1998.

Cinco años atrás, la nación caribeña dejó escapar en el estilo clásico la corona en 97 kilos, en Veracruz 2014 la de los 75, no estuvo en Mayagüez 2010 y en Cartagena de Indias 2006 no ganó tres divisiones.

Ahora en territorio salvadoreño, México quedó segundo con dos platas y cuatro bronces, y tercero concluyó Venezuela, con un segundo puesto y cuatro terceros.