A Cuba hay que quererla... más que una canción

Hace años que el trovador cubano Raúl Torres lo viene cantando: A Cuba hay que quererla... pero en estos días difíciles la canción se ha hecho voluntad, empeño, solidaridad. Primero a un hogar de niños sin amparo familiar en la ciudad de Matanzas y ahora hasta el capitalino hospital Manuel Fajardo, llegó el amor de cubanos y cubanas que se han sumado al proyecto liderado por el autor de Cabalgando con Fidel.

Feliz, dijo sentirse Raulito con la respuesta que ha tenido la iniciativa de apoyar los esfuerzos del gobierno y el sistema de salud cubanos en el enfrentamiento a la pandemia de Covid 19: "esto no para, me siguen escribiendo personas que quieren hacer sus aportes y vamos a continuar", aseguró en la mañana de este domingo luego de la entrega de 19 cajas con aseo personal, material de limpieza, mascarillas, cloro, gel antibacterial entre otros insumos.

Según trascendiuó en el acto de entrega, entre los donantes se encuentran contribuyentes a título personal, incluidos jubilados del barrio en que está enclavado el centro asistencial. Además, se sumó el Ministerio de Comercio Exterior, el Centro de Negocios de Miramar, Construcciones Militares de las FAR, el MINREX, la empresa AICROS del Ministerio de la Construcción, el grupo musical Corazones de Fuego, estudiantes de medicina de la Facultad que radica en el propio hospital, el proyecto Puentes de Amor y vecinos de la comunidad.

"La humildad y la entrega de nuestros médicos nos toca hondo el sentimiento, tanto sacrificio te inspira" esas son las razones por las que la trabajadora por cuenta propia Edelmis Morandecidió hacer un espacio entre las obras que tiene contratadas con su brigada de construcción para asumir, sin costo alguno, el remozamiento de varias áreas directamente vinculadas a la terapia intensiva.

Una trabajadora de ETECSA, Tamara Dovale donó pintura y puso manos a la obra junto a una representación del proyecto Puentes de amor para embellecer algunos locales del hospital. El diplomático Amado Riol, vecino del centro ha apoyado la recogida y organización de los donativos, la Secretaria General del Núcleo Zonal con un entusiasmo infinito se incorporó a la idea y afirma que allí estarán ella y sus compañeros, dispuestos para lo que necesite el equipo del Fajardo.

Y es que en esta batalla por la vida todo cuenta, todos y todas contamos. Hay una sola verdad inamovible, inquebrantable que nos une y nos salva: querer a Cuba y ponerle el corazón.