Dalidaivis Rodríguez: El honor de portar la bandera… y confianza en el éxito

«¿Todo bien, estelar? ¿Lista para dar batalla en Río?» Así inicié mi plática online con la judoca Dalidaivis Rodríguez (7 de agosto de 1983). Aún no ha asaltado los tatamis de la Arena Carioca III y ya la vida la ha premiado, pues en sustitución de la velocista Omara Durand, quien tiene eliminatorias de 100 metros en la mañana del jueves ocho de septiembre, portará la bandera cubana en la ceremonia de apertura de los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro.

«Sí, todo bien, honrada con mi condición de abanderada, y será un placer para mí ayudarte, pero… ¿entrevista por acá? ¡Ustedes son la candela!»

Así comenzamos nuestra plática, o más bien entrevista, porque le dejé una ráfaga de preguntas cuando frisaban las 5:30 p.m. de la tarde y estaba presto a regresar a casa. Entonces aposté a su cooperación y al abrir mi Facebook en la mañana de martes, me sorprendió con sus respuestas, muy profundas, por cierto. La plática continuó por cauces totales de diafanidad, como si hubiésemos sido compañeros de tatami en la infancia, como si no nos separaran 6 642 kilómetros de distancia entre La Habana y Río de Janeiro.

«Comencé en el judo a los 11 años, era deportista convencional. Me captaron luego para la EIDE Mártires de Barbados, continué en la pirámide en la ESPA. Obtuve medallas a nivel nacional en todas las categorías. Siempre tuve problemas de visión, pero no fueron agudos hasta después de los 24 años».

¿Qué sucedió entonces?

«Luego, a los 26, me avisan para realizarme pruebas de la vista y darme la posibilidad de formar parte del equipo de baja visión, y clasifiqué. Recuerdo que fue en el año 2009 cuando ingresé en la preselección nacional. Paradoja del destino, pues en estos momentos soy la única atleta femenina de esta especialidad en el equipo nacional».

Estelar, hay otras preguntas que no me contestaste: Atleta de la preselección con quien mejor aprovechas los sparrings... Tu rival más difícil... ¿Cómo recuerdas el título de Londres 2012? El entrenador que consideras te ha aportado más en tu formación... Algún momento malo...

«Suave, que me has hecho muchas. En cuanto a los sparrings, intento aprovechar a todas mis compañeras porque busco las características de mis rivales en ellas, según somatotipo, técnicas y posturas de combate. Mi rival más complicada es la ucraniana Iryna Husieva. Perdí con ella el 5 de septiembre del 2014 en la final de la Copa del Mundo para Ciegos y Débiles Visuales (IBSA) de Colorado Springs, Estados Unidos. Es un poco alta y difícil, pero me he preparado muy bien con su gemela acá en Cuba, Arnay Odelín, al punto de que ya no me resulta tan complicada. El entrenar a diario con judocas convencionales, someternos al mismo rigor de su planificación, con las especificidades propias de nuestro calendario competitivo, según la etapa preparatoria, nos eleva mucho el nivel. Esa capacidad por encima me beneficia y me coloca apta para enfrentar cualquier competición».

Tanto es así, que desde que se alzó con el título paralímpico en Londres 2012, además de esa derrota, solo ha sucumbido con la judoca convencional ecuatoriana Karla Campos en el Grand Prix de La Habana 2014.

¿Un entrenador?

«Ronaldo Veitía es mi padre y amuleto, aprendo de él hasta cuando está en silencio. No puedo dejar de mencionar también a Ibis Dueñas, mi actual entrenadora, con quien trabajo muy duro a diario para lograr cosechar mis triunfos».

¿Londres significó la gloria total?

«Londres para mí significó un gran triunfo, el sueño anhelado de todo deportista. Lograrlo siempre es algo grandioso, una inexplicable experiencia. Ahora es un reto distinto, se trata de mantener el liderazgo, demostrar que no existe casualidad porque un triunfo es el resultado de un buen trabajo que se hace, y es por eso que esta vez me ha tocado exigirme el doble de duro que antes».

¿Dónde te consideras más sólida en el tatami?

«Me gusta mucho el trabajo de newaza (en el suelo), constituye mi prioridad pues me ha aportado siempre muchos resultados positivos. Baso mi accionar sobre las técnicas de inmovilización, luxación y estrangulación, contrario a la mayoría de las judocas cubanas, que no suelen trabajar en esa posición. Dicen que soy muy buena estrangulando y debe ser cierto, ya que cuando logro una presa, nadie se me escapa».

En todo este tiempo, imagino que el apoyo de tu familia ha sido crucial.

«Mi familia es estelar, como tú dices. Todas son tan deportistas como yo. Cuando comienzo una preparación están en función de mí, muy pendientes, hasta mi hermana pequeña. Es increíble pero funciona así. La menor de mis hermanas se llama Elines, me colabora con todo en la casa, no me deja hacer nada y me manda a descansar».

¿Cómo compensas tantas horas de dedicación en tus ratos libres?

«Dime el nombre de un deportista que cuando no esté practicando o entrenando, no escuche música. Esa es una de mis pasiones. Prefiero la bachata y la música romántica. Me relajan y ayudan a concentrarme. Estamos hablando de muchas horas diarias de preparación en dependencia de la etapa. Pueden variar entre cuatro y seis diarias; de ellas, dos o tres al componente técnico del judo».

¿Pareja? ¿Técnica más efectiva? Tendré que amonestarte con un shido por pasividad en las respuestas.

«No todo es para publicar. Afloja con la velocidad… En cuanto a las técnicas, el ippon seoi nage y el koshi jime en el newaza, ambos muy efectivos para mí. Lo de la pareja, me lo reservo».

¿Podemos decir que has llegado a la Ciudad Maravillosa en óptimas condiciones?

«No solo yo, también mis compañeros de equipo. En lo personal, han sido cuatro años de esfuerzos ininterrumpidos. Me siento preparada física y técnicamente, además de muy centrada en mi objetivo también».

Excelente materia prima, estelar... ¡Miles de gracias! Ahora, a trabajar en la redacción... Si tienes alguna foto de Río en estos días o combatiendo, me la puedes enviar por acá... te lo voy a agradecer mucho más... Besos y todo el éxito del mundo, ya hablaremos cuando el oro brille en tu pecho.

«Dios te oiga». Así de simple fue su sentencia. Al cabo de los minutos, ya tenía algunas instantáneas, cortesía de la entrevistada. Nuevamente la magia de Facebook. Este miércoles, cuando Dalidaivis porte el pabellón patrio durante el desfile inaugural, habré tenido el honor de entrevistarla.

Cierro con una estadística: en torneos de primer nivel, del 2012 a la fecha, exhibe contundente saldo de ocho triunfos y los dos mencionados fracasos, según el portal especializado www.judoinside.com.