Dónde dormirá el Papa cuando visite Estados Unidos

Dónde dormirá el Papa cuando visite Estados Unidos
Fecha de publicación: 
22 Septiembre 2015
0
Imagen principal: 

Los papas no duermen en hoteles. Por una costumbre milenaria, los Pontífices pasan la noche en territorio propio, o sea en las sedes vaticanas alrededor del mundo. Francisco seguirá la tradición y ya hay un batallón de personas que sacan lustre a las residencias y ultiman cada detalle para que todo sea perfecto: ya está listo, por ejemplo, un colchón nuevo y firme, con “memoria inteligente”, para el buen descanso del visitante ilustre.

En esta gira que emprende hoy por Estados Unidos, Francisco dormirá dos días en la Nunciatura estadounidense, o sea la embajada del Vaticano en Washington. Luego pasará en Nueva York una sola noche, en la representación de la santa sede ante las Naciones Unidas, y en Filadelfia dormirá dos, en la sede del arzobispado local, antes de partir para Roma.

La casa de estilo gregoriano en la elegante avenida Massachussetts de esta capital, enfrente de donde vive el vicepresidente Joe Biden, tiene coquetos salones para recepciones abajo, pero algunos que han visitado las áreas privadas en los pisos superiores dicen que son más bien modestas. No se han dado detalles oficiales de los preparativos, pero se sabe que es una de las sedes vaticanas mejor mantenidas.

La sede del nuncio en Nueva York, en la calle 72 cerca de la 5ta avenida, está ubicada en una de las zonas más elegentes de Manhattan, cerca de los más importantes museos de la ciudad. La mansión del siglo XIX, de estilo renacentista, tuvo que ser modernizada estos días, sobre todo en temas de plomería y electricidad.

En Filadelfia, donde no hay presencia diplomática vaticana y el Papa asistirá al Encuentro de Familias, pasará dos noches en la residencia del arzobispo, que también pertenece a la Iglesia. Cuando Juan Pablo II visitó la ciudad en 1979 durmió en una mansión de 2.100 metros cuadrados. Pero con los escándalos de abusos sexuales de sacerdotes en Estados Unidos que estallaron en 2002, y las indemnizaciones que hubo que pagar a las víctimas, esa residencia se vendió y ahora el arzobispo vive en una más modesta residencia en el Seminario San Borromeo.

Allí dicen que el Papa, que dejó los aposentos vaticanos para vivir en la más austera sede de Santa Marta, estará mucho más a gusto en ese lugar.

Igualmente todos están allí atentos a los más mínimos detalles. Una silla que fue usada por Juan Pablo II fue enviada a restaurarse y unos pintores locales donaron su tiempo para hacerlo. También un fabricante de alfombras donó varios metros para redecorar el lugar.

Y otro comerciante de la zona fue el encargado de quizás uno de los detalles más delicados de la gira: garantizar el sueño del Papa. Cuando una gran firma fabricante de colchones pidió al arzobispado donar uno adecuado para las necesidades y gustos del Pontífice, le informaron que precisarían uno tamaño “queen” (de 1,52 m), de contextura firme y con “memoria inteligente”, con un gel y espuma especial que mantiene el cuerpo a una temperatura constante. No se sabe si el arzobispado solicitó tan sensible información directamente al Vaticano o si se trató de un gesto de delicadeza ante tan ilustre visita.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.