Dayron Robles no es un tramposo

Dayron Robles no es un tramposo
Fecha de publicación: 
31 Agosto 2011
29

Han pasado menos de 48 horas de una de las carreras más comentadas en la historia de los campeonatos mundiales de atletismo: los 110 metros con vallas, pero todavía las discusiones polémicas sobre el incidente se extienden tanto a especialistas como a desconocedores del campo y pista, a quienes la televisión o Internet ha saturado con las imágenes de esa final. 

LEER MÁS: El insomnio de Daegu (I)

 
LEER MÁS: Sabor amargo entre vallas

 
LEER MÁS: Dayron Robles gana, pero lo descalifican (FOTOS y VIDEO)

Lejos de la descalificación oficializada al campeón olímpico, Dayron Robles, tras una reclamación de la delegación china por obstrucción a su representante Liu Xiang, lo cierto es que lo sucedido en Daegu ha llevado a muchos medios de comunicación del planeta y a no pocos cibernautas a calificar al antillano como un tramposo.

Vayamos por parte e intentemos la mayor claridad sobre lo sucedido, sin apasionamientos o justificaciones. Existió un roce en las vallas nueve y diez entre el brazo derecho del cubano y el zurdo del asiático, no equivalentes a ningún "agarrón descarado" como escribiera un periodista español en el súper influyente diario El Pais.com.

Las técnicas de cada atleta para brincar en perfecta sincronización las vallas conllevan posturas de brazos y piernas muchas veces equivalentes a "estar nadando sobre el aire", debido a la amplitud de los movimientos que se realizan, sobre todo de los brazos, lo cual ha provocado decenas, cientos de codazos, golpes y roces accidentales entre vallistas, en toda la historia de este evento.

Lo anterior lo conocen de sobra Dayron, Liu, David Oliver y los ocho finalistas en Daegu, como también lo conocieron y vivieron muchas veces Allen Johnson, Anier García, Terrence Trammell, Colin Jackson, Roger Kingdom y Greg Foster, por solo citar algunos de los más grandes vallistas de todos los tiempos, a quienes nunca se les vio reclamar en finales mundiales ni olímpicas, en las cuales no faltaron esos contactos personales, incluso más fuertes que lo vivido este 29 de agosto.

¿Qué diferencias puede haber  entre esas historias pasadas y recientes y la de la final mundial del 2011? ¿Por qué los entrenadores chinos reclamaron si su atleta estaba consciente del resultado al afirmar a la prensa minutos después de llegada a la meta: "Estoy de acuerdo con lo que ha sucedido hoy y este es un buen resultado para mí. Robles venía muy bien preparado y yo he hecho todo lo que podía. No tengo que lamentarme de nada"? ¿Existe o no una ley interna, un código no escrito, que apela a lo moral, a lo ético y a esa valentía del vallista cuando suceden esos incidentes sin intencionalidad?

A la comitiva china le asistían todos, todos los derechos para reclamar y pedir que fuera aplicada por el Juez de la pista la regla 163.2 por obstrucción a su corredor a partir del contacto real del cubano en los últimos obstáculos. Lo cuestionable es que hicieran uso de ese recurso cuando no existe todavía ningún vallista del orbe, ninguno, ni el de la más depurada y pulcra técnica, que no haya tenido alguna vez fricción con su rival de la otra carrilera y por supuesto, eso haya influido en una medalla. Es más, muchos han ganado coronas y subido a los podios de premiaciones luego de empujones, codazos y los llamados manotazos.

A Liu pareció olvidársele que en mítines atléticos por Europa, donde no hay videos en cámara lenta y desde todos los ángulos, ni tampoco hay premios metálicos tan cotizados como en un campeonato mundial, muchos entrenadores han reclamado iguales roces —incluso provocados por él—, pero el Jurado de Apelaciones nunca ha revertido el final de una carrera. Es decir, al legítimo reclamo chino debió ir asociado el pensamiento que prima entre los atletas, incluso más allá de las vallas, en todas las carreras de velocidad y fondo: "aquí todos tenemos techo de vidrio".

Quizás los mayores argumentos a lo anterior están en las declaraciones de conocedores y víctimas de estos roces:

"El resultado inicial no debió ser modificado. Eso pasa en cada carrera con vallas, me pasó en la semifinal ... qué mala suerte", dijo Oliver en su cuenta de twitter.

"He corrido muchas carreras de vallas y no existe¬ nada antirreglamentario en esa carrera, si¬ hubiera sido Roger Kingdon el que venía desde atrás le¬ hubiera roto el brazo al cubano, pero Liu Xiang es un¬ vallista de ritmo y no supo recomponerse o¬ sencillamente aguantar el roce. Si¬ quieren que entre los corredores no exista¬ competitividad y espectáculo que cada uno corra solo¬ como si fuera un test y que gane el que mejor marca¬ haga", acotó un ex atleta en el portal de yahoo.

"Es algo agridulce ganar el oro de esta manera. Por nada del mundo quieres que alguien tan talentoso como Robles sea descalificado", indicó el beneficiado Jason Richardson, que pasó de subtitular a campeón en dos horas y media.

El ánimo de estas líneas tampoco es apostar por los golpes y roces en carreras de vallas, de velocidad, medio fondo, etc —como sucede todos, todos los días—, sino defender la pertinencia de proceder a reclamaciones de este tipo cuando no hubo intencionalidad, pues nadie, nadie hasta ahora ha podido cuestionar el talento y las condiciones excepcionales de Dayron, por demás recordista del mundo (12.87), oro olímpico y universal bajo techo, lides en que ha derrotado a sus rivales con la misma técnica que algunos critican ahora, solo por el hecho de que un brazo haya encontrado casualmente el de su adversario en la carrilera seis en par de ocasiones.

Si Jamaica lloró a Usain Bolt por una descalificación justa hace unos días, Cuba también lo hizo por una similar con su estrella, pero en la que la interpretación humana no puede indicar nunca una trampa.

Dayron Robles está muy lejos de ser un tramposo como comienzan a insistir varios medios de prensa con intencionalidad maliciosa, pues entonces una buena parte de los atletas que se solidarizaron con él en estas 48 horas lo estarían siendo por "un roce de palabras ofensivas".

Prefiero entonces resumir este comentario. Dayron le ganó en Daegu el duelo a los hombres que más rápido han corrido los 110 metros con vallas en cualquier época, aunque el oro no descanse hoy en su vitrina y Liu Xiang sepa que esa reclamación no era propia ni correspondía a un vallista de su estirpe.   

Comentarios

Lo que todo el mundo sabe es que Dayron Robles ganó la carrera con medalla o sin medalla es un campeón
Solo quiero decir, que al observar detenidamente las imágenes se puede ver claramente que además de Dayron otros corredores a su alrrededor tambien irrumpen en otros carriles incluyendo el espacio de Dayron. Si fueran justos seguramente no habrian ganadores en esa carrera.
Bueno, Existió un roce en las vallas nueve y diez entre el brazo derecho del cubano y el zurdo del asiático, no equivalentes a ningún "agarrón descarado" como escribiera un periodista español en el súper influyente diario El Pais.com. Eso es cuestión de apreciación, subjetiva. Lo que se vió en la carrera es que el "agarrón", o el "roce" existió cuando el chino sobrepasaba al cubano en las dos últimas vallas. Además el argumento de que se ya pasó y no se reclamó, es risible. El propio Robles sabía que había interferido a Liu, pues al finalizar la carrera fue a darles sus disculpas. Sinceramente, creo que le cubano no necesita de nada de eso para ganar, pues es el mejor del mundo. Pero la aplicación del reglamento de la Federaíón Internacional de Atletismo, me parece ajustada. Para que no se repetia. Eso de: "(...)a reclamaciones de este tipo cuando no hubo intencionalidad, pues nadie, nadie hasta ahora ha podido cuestionar el talento y las condiciones excepcionales de Dayron" La intencionalidad o no, es subjetiva, de apreciación, y nada tienen que ver con las dotes de Robles. Ahora, finalmente, no creo que resucitar historias de David contra los Gigantes, sea producente, ni para el propio Robles, ni para el atletismo. En cuanto a: "Dayron Robles está muy lejos de ser un tramposo como comienzan a insistir varios medios de prensa con intencionalidad maliciosa, pues entonces una buena parte de los atletas que se solidarizaron con él en estas 48 horas lo estarían siendo por "un roce de palabras ofensivas" Los medios, los cibernautas, las personas cada cuál tienen el derecho de pensar y escribir, aunque lo coincida con los dos roces intencionales o casuales, eso lo conoce solo Robles... Saludos
EL CHINO ES UN GRAN CORREDOR, EX RECORDISTA DEL MUNDO, QUE SE ALEJO DE LAS PISTAS POR UNA LESIóN, CREO QUE EL AñORA VOLVER A LOS PLANOS ESTELARES QUE TUVO, PERO ESO DEBE SER SOBRE SU DESEMPEñO, SOBRE SUS LOGROS Y CUALIDADES, NO SOBRE RECLAMACIONES QUE AUNQUE AMPARADAS EN REGLAS (NO TODAS SON JUSTAS) RESULTAN INMORALES Y DESLEALES, SEGUN CONOZCO POSEE BUENAS RELACIONES CON DAYRON. LIU XIANG LLEVA VARIOS AñOS CORRIENDO Y SABE CUALES SON LAS REGLAS DE LA PISTA, LAS QUE DE VERDAD SUCEDEN A DIARIO. ME PARECE QUE TANTO EL COMO SUS ENTRENADORES DEBIERON SER ETICOS Y SABER RECONOCER QUE FUERON DERROTADOS, QUE NO SE PUDO REPONER DE LA PERDIDA DEL RITMO DE CARRERA Y QUE PERDIó EN BUENA LID. A PESAR DE TODO DAYRON SI COMPITIó Y GANó, PARA LOS CUBANOS Y SUS AMIGOS EN EL MUNDO ES EL úNICO CAMPEóN Y EL MEJOR CORREDOR DE LOS 110 CON VALLAS DE LA HISTORIA, ESO NO HAY REGLA NI RECLAMACIóN QUE SE LO QUITE. PARA EL CHINO QUE SE ESFUERSE MAS PORQUE ESTA VEZ SE QUEDó CORTO EN LA PISTA Y EN LA éTICA.
No soy para nada alejado de nuestros deportistas y a pesar de no conocer a cabalidad reglas y arbitrajes en este tema, cuestión que no hace que no seamos capaces de "meternos" en todo como cualquier cubano, si vi, y en mas de una ocasión, la carrera de Dayron y aunque creo que fue muy buena hasta el desenlace no se puede negar que tiro manotazos, en 2 oportunidades para casi agarrar y en la 3ra para desnivelar y casi provocar caer el también, no creo por demás que lo haya hecho con la clara intención de parar o tumbar a su rival, pero a lo hecho pecho y no podemos querer ganar 1 medalla que si hubiera sido a la inversa reclamaríamos con uñas y dientes, como lo que somos, patriotas convencidos due nuestra fuerza, pero no por eso se nos pueda tildar de tramposos, que el chovinismo sea para bien, no opaquemos lo logrado en el deporte, no lo hagamos política barata, como ese articulo que recién leí, en el que se habla de Dayron y Liu y entonces se dice: que el americano no se quien, también tropezó en las clasificatorias y semifinales, seamos capaces de asumir lo mal hecho, con buenas o malas intenciones y no dejemos que se empañe el criterio de muchos en el mundo de que el deporte cubano merece un lugar en la gloria, siempre que lo merezca, y este no es el caso.

Páginas

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.