Barranquilla 2018: Discreción desde las piscinas

Aunque deseos sobran y trabajan al máximo, deportes como el clavados y la natación artística –antes conocida como nado sincronizado- llegarán esta vez a unos Juegos Centroamericanos y del Caribe con opciones mucho más discreta que en ocasiones anteriores.

En el Complejo Acuático de Barranquilla –que por cierto tiene en duda su terminación- los antillanos se presentarán sin fortalezas que exhibieron en el pasado, no obstante aseguran que es posible lograr algún metal.

Los de los saltos ornamentales solo llevarán con experiencia en estas lides a Jeinkler Aguirre, a quien una lesión le alejó por dos años de la competición.

En total serán ocho los representantes cubanos en el clavados, divididos en cuatro hombres e igual cantidad de mujeres, y pese a que cubrirán los 10 eventos convocados el conseguir un metal bronceado ya parecerá una buena actuación.

Es el clavados un deporte con mucha fuerza en el área, medallistas olímpicos y mundiales estarán ahora como favoritos a los títulos, especialmente un México se quedó con siete coronas. Las otras dos fueron para Colombia, que es la sede ahora.

La comisionada nacional Milagros González confirmó que tras el campeonato nacional –que comienza este miércoles- se confirmará el equipo, aunque algunas figuras son casi seguras como la plataformista Anisley García.

Similar panorama de mucha calidad a enfrentar con atletas sin grandes experiencias, tendrá la natación artística con sus 10 clasificadas.

Ganar un bronce en la rutina libre combinada parece la aspiración más lógica para una disciplina que en Veracruz se fue sin premios de ningún color.

Con promedio de edad de 16,7 años, las antillanas irán en los siete eventos convocados, pero se sabe que el nivel es inferior al de países como Colombia, México, Venezuela y Guatemala, favoritos en ese orden.