Yaimé Pérez se consolidó como la atleta más estable de Cuba durante el ciclo que culminó en Tokio, pues además de su bronce olímpico patentó dos coronas de la Liga del Diamante. foto. Getty.
«Dejamos atrás un año marcado por la pérdida física de hombres y mujeres que se entregaron a plenitud al trabajo y se suman a la riqueza de un legado que demanda multiplicar esfuerzos en todos los órdenes», sostuvo.