
En una publicación en Twitter, el Ministro cubano de Relaciones Exteriores denunció que los mecanismos unilaterales de Washington para bloquear el suministro de petróleo a la nación caribeña son acciones ilícitas no convencionales con ese objetivo.
«Son prácticas gansteriles de amenaza y castigo contra relaciones comerciales legítimas entre Estados soberanos. #Cuba sigue en pie de lucha», escribió en la referida red social, a propósito de conocerse la inclusión por el gobierno estadounidense en su unilateral lista de entidades sancionadas a seis buques que transportaban combustible de Venezuela a la mayor de las Antillas.
Las embarcaciones castigadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro son Ícaro, de bandera panameña, y Luisa Cáceres de Arismendi, Manuela Sáenz, Paramaconi, Terepaima y Yare, de bandera venezolana.
Recientemente, Washington incluyó a la Corporación Panamericana de Cuba en la mencionada lista por, según el comunicado del Departamento norteamericano del Tesoro, la compañía responder a Cubametales, una entidad cubana sancionada en julio por el gobierno del país norteño.
Para ejecutar ese tipo de acciones, la Casa Blanca utiliza como pretexto las relaciones de hermandad, amistad y de cooperación entre Cuba y Venezuela, cuando en realidad su finalidad es política, pues consiste en derrumbar los procesos democráticos de esos países, denuncian La Habana y Caracas.