Brutalidad policial provoca muerte de un joven latino en California

Agentes de policía en Alameda, California, inmovilizaron a un joven latino en el suelo durante unos cinco minutos antes de que dejara de responder durante un arresto la semana pasada, según imágenes de la cámara corporal que la ciudad publicó después de su muerte.

Después de que Mario González, de 26 años, dejó de responder, los agentes usaron compresión en el pecho para tratar de reanimarlo, dijo la ciudad en un comunicado que acompaña a las imágenes del incidente del 19 de abril, que se publicó el martes por la noche.

González murió en un hospital ese día, según el comunicado.

Las protestas por la violencia policial y la desigualdad racial se han extendido por todo el país en los 11 meses desde el asesinato de George Floyd, un hombre afroamericano, en Minneapolis por un oficial blanco, Derek Chauvin, quien fue condenado por asesinato la semana pasada. Lee mas

En Alameda, una ciudad de casi 80,000 habitantes adyacente a Oakland, los oficiales fueron enviados a un parque para ver cómo estaba González después de que los residentes en dos llamadas de emergencia al 911 informaron que un hombre merodeaba y parecía estar hablando solo, según las grabaciones de las llamadas publicadas. por la ciudad.

Las imágenes de la cámara del cuerpo de los agentes muestran al menos a dos agentes acercándose a González y tratando de determinar su identidad. Un oficial pregunta de dónde sacó González lo que parecen ser botellas de alcohol en una de las dos canastas de compras, y dice que necesita identificarlo para asegurarse de que no haya órdenes de arresto pendientes en su contra.

Luego, los oficiales intentan detener a González y luchan por ponerle ambas manos detrás de la espalda, según muestran las imágenes. Le dicen al hombre que deje de resistirse y, finalmente, lo arrojan al suelo, con el cuerpo hacia abajo.

"Mario, por favor no te resistas", dice uno de los oficiales.

Luego, los oficiales luchan por un poco más de cinco minutos para mantener a González inmovilizado y para ponerle ambas manos detrás de la espalda para poder esposarlo. Uno de los oficiales tiene su rodilla en el hombro del hombre para sujetarlo.

Se puede escuchar a González pronunciar "Ahhh, ahhhh" durante la refriega.

"Creo que bebiste demasiado hoy, eso es todo", dice uno de los oficiales.

Luego revisan el pulso. Cuando González no responde, lo dan vuelta y comienzan las compresiones en el pecho antes de que lleguen los paramédicos. Una declaración inicial de la ciudad dice que se produjo un "altercado físico" después de que los agentes intentaron detener a González, quien, según dijeron, había sufrido "una emergencia médica".