Carta kurda: Para mantener la agresión a Siria

Carta kurda: Para mantener la agresión a Siria
Fecha de publicación: 
19 Junio 2019
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Fiel a su estrategia agresiva de destruir todo lo que no pueda vencer y ocupar, Estados Unidos ha intensificado su apoyo a las fuerzas kurdas que tratan de construir el Estado de Kurdistán con territorios de Siria, Iraq, Turquía y Tayikistán, y amenazado a Ankara de destruirla económicamente si ataca a sus “pupilos”, a quienes tiene destinados en realidad para mantener la agresión al pueblo sirio.

El envío de otros 150 camiones con armas a los kurdos, se agrega a otros 250 suministrados a principios de mayo pasado, en tanto asesores norteamericanos manejan a grupos terroristas que han mantenido ataques contra la población de Alepo e Idlib, así como la destrucción de la infraestructura petrolífera y extensos campos de trigo.

No conforme con esto, EE.UU., junto a su aliado israelí, ya ha suministrado misiles antiaéreos portátiles a los kurdos agrupados en el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) en el norte de Siria.

Al respecto, el diario turco Yeni Safak acotó este martes 18 que el PKK, ha designado las ciudades de Al-Remellan y Shadada, en la provincia de Al-Hasaka (noreste de Siria), así como las regiones de Jalabiya (norte) y Al-Omar, en Deir Ezzor (este), como puntos de lanzamiento de los misiles que suministre Washington.

Conforme al reporte, Israel ha prometido además suministrar a los kurdos misiles antitanque guiados Spike en las provincias sirias de Deir Ezzor y Al-Raqa (norte), luego de reuniones de alto nivel entre jefes de esa etnia y funcionarios israelíes.

Turquía advirtió que no se quedará de brazos cruzados ante el apoyo de EE.UU. a los grupos armados kurdos, considerados como terroristas por Ankara, pero el Pentágono ni se molestó con esta amenaza de otro integrante de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

En agosto del 2018, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), con sede en el Reino Unido y opuesto a Damasco, informó que la llamada “coalición contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe)” liderada por EE.UU., había iniciado el envío de armas en grandes cantidades a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), en su mayoría integradas por kurdos y apoyadas por Washington.

Entretanto, Turquía ha denunciado ya en varias ocasiones el respaldo de EE.UU., a las milicias kurdas de Siria, y ha reclamado a Washington que ponga fin a ese apoyo.

Las autoridades turcas temen que el fortalecimiento de los kurdos del norte de Siria dé alas a su propia insurgencia, pero Washington los sigue considerando un aliado indispensable para materializar sus intereses en el país árabe.

Mucho, pero mucho dinero han estado recibiendo los jefes de esos grupos kurdos para tratar de echar tierra a una anterior decisión norteamericana de abandonarlo, debido al fracaso de os terroristas a manos de las tropas del Ejército Árabe Sirio y sus aliados ruso, iraní y libanés.

Trump y el grupo de halcones que mantiene en su gabinete quieren mantener a toda costa una de las mayores guerras de agresión de la historia moderna de más de ocho años, en tanto la prensa occidental la ha descrito como "guerra civil" o "primavera siria", cuando es un conflicto bélico que realmente viene a ser una guerra injerencista o de cambio de régimen y no una confrontación civil.

Nada nuevo en el horizonte, porque esa praxis la vienen practicando las potencias colonialistas y los actuales estados hipercolonizadores desde hace décadas en Latinoamérica, África, Medio Oriente y Europa del Este; a veces por intereses militares, financieros o estratégicos, y otras por ansias expansionistas o en respuesta a los deseos de entidades supraestatales y diferentes oligopolios y lobbies globalistas.

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