Judo cubano: Rendimientos y perspectiva de olimpismo en primera persona (+VIDEO)

El judo continúa con solidez su ruta crítica competitiva. Los mejores del orbe tienen clavado entre ceja y ceja la posibilidad de clasificarse a los Juegos Olímpicos de Tokio y buscan a sangre y fuego sobre el tatami acumular puntos que los coloquen en posiciones ventajosas en los respectivos rankings divisionales.

Antalya, Turquía, fue el escenario más reciente de confrontación, y ante la presencia de 479 competidores (188 féminas) de 75 países, los exponentes antillanos se agenciaron el cuarto lugar por naciones con un oro y una plata, fraguados por las damas Maylin del Toro (63 kg) y Kaliema Antomarchi (78), respectivamente.

Desenlaces que se antojan cruciales pues tanto ellas como otros miembros de nuestras escuadras élites urgen de escalar peldaños en los escalafones, si de inscribirse en una cita bajo los cinco aros estamos hablando.

CubaSí tuvo la posibilidad de dialogar vía electrónica con las dos féminas, y el as Iván Silva (90 kg) justo antes de que partieran hacia el aeropuerto y comenzaran a dibujar en sus horizontes posibles rendimientos en el Panamericano de Lima (a partir del 25 de abril), clasificatorio a la cita multideportiva continental.

Maylin del Toro: Su título en suelo turco la hizo escalar seis posiciones en el ranking (11-3 130 ptos). Doblegó a rivales de consideración como la británica Alice Schlesinger (18-2 586), la china Jing Tang (28-1 692) y la venezolana Anriquelis Barrios (33-1 459), esta última una posible rival directa de Maylin en la ruta hacia el cetro continental.

Cabe destacar que Del Toro fue bronce hace cuatro años en Toronto, y que en lo que va de 2019 acumula saldo en el primer nivel internacional de 8-3. Otro elemento importante es el hecho de que en el escalafón olímpico también goza en este minuto de un cupo a Tokio (12-1 095 y clasifican los 18 primeros de cada división) por lo que deberá luchar a brazo partido por mantenerse o elevar ese palmarés.

“He tenido buenos rendimientos en esta parte de la gira. Todos los combates en Antalya no fueron fáciles. El que debía ser más difícil era la semifinal con la británica. Es una judoca muy experimentada medallista y campeona de Grand slam y Grand Prix...

Pero fue el más rápido de todos. Salí a competir sin pensar en la medalla, solo imponerme en cada combate, y poder desquitármela con la rusa y la venezolana, cuestiones que conseguí.

La final con la china, la más incómoda de todas fue intensísima... Primera vez que nos enfrentamos y en el campo de entrenamiento en París no tuve la oportunidad de realizar sparrings con ella.

El profe Arencibia y yo la vimos en los combates anteriores y a partir de ahí formamos la estrategia para poder alcanzar la victoria
Me sentí muy segura y relajada. No puedo negar que al principio de la competencia estaba un poco tensa, algo que es natural.

Le agradezco al profesor Yordanis Arencibia la forma en que me hace sentir: súper bien y confiada de mís potencialidades antes de cada pleito. Nunca nos presiona por coger la medalla, solo nos pide que nos soltemos en los combates y que salgamos a disfrutarlo.
La frase que más me gusta y me ralaja es cuando me dice (confío en tí) cada vez que me lo dice yo respiro y me relajo.

Desde Cuba me preparé muy bien con la ayuda de mis compañeras(os) y los entrenadores para poder alcanzar un medalla en estas competencias y se logró el objetivo. Alcancé el bronce en Georgia y me propuse subirme nuevamente al podio en Turquía, así que aproveché el campo de entrenamiento en Georgia para alcanzar el objetivo y me coroné por primera en un Grand Prix”, expresó la atleta de 24 años que confieza debe mejorar sus kumis (agarres) a la manga y buscar más controlar con estos por encima del hombro de sus rivales.

Kaliema Antomarchi: Exhibe balance de 6-4 en este 2019, además de privilegiadas plazas ocho-4 148 del ranking del orbe; y diez-12 75 del olímpico. La plata de Antalya significó repetir el rendimiento de Tiblisi y su quinto podio dentro del circuito World Tour de judo.
“Me sentí bien en Tiblisi, pero mucho mejor en Antalya. Aunque no alcancé la medalla de oro me sentí con más seguridad y confianza a la hora de pelear. Realizamos un campo de entrenamiento en Georgia que me fue de gran ayuda para esta competencia.

Los parámetros de fuerza han mejorado un poco, aunque debo seguir trabajando ya que sigue siendo este elemento mi talón de Aquiles.

¿Consideras que el haber vivido tantos años a la sombra de Yalennis y Yurisel te ayudó a obtener este resultado en Budapest?

“Mucho. Siempre tuve una preparación de nivel muy alto. Aunque durante mucho tiempo supe que no sería la atleta fundamental, entrenaba como si me estuviese preparando para asistir yo a unos Juegos Olímpicos. En lo absoluto bajé la guardia ni me desmotivé.

Ahora ha salido a relucir ese esfuerzo de tantos años, el sacrificio no fue en vano y se rompió la espera”.

Una judoca no muy conocida, ¿dónde se concentran tus virtudes a la hora de hacer judo?

“En realidad no me considero una atleta fuerte. Para mi división aprovecho la rapidez y la técnica. Me baso en el grupo de técnicas de piernas y caderas. Por mi estatura, y la longitud de mis extremidades, realizo los agarres en función de estos y se me hacen más fáciles las proyecciones cuando trabajo sobre esos planos”.

¿Sobre qué elementos debes trabajar con mayor rigor de cara a continuar creciendo?

“Fundamentalmente sobre la fuerza. Y paralelamente mejorar la fidelidad al pensamiento técnico-táctico. A veces falla y resulta determinante en un desenlace o veredicto. Especialmente cuando el nivel de las judocas que enfrento es similar, o ligeramente superior al mío en materia de alta competición y fogueo”.

Durante las sesiones diarias de entrenamiento hacer randoris con los varones, ¿cuánto te aporta?

“Desde antes del Mundial del 2017 concentré los entrenamientos con los varones. Eso resultó fundamental. El resto de las muchachas de la preselección nacional en los pesos grandes tienen buen nivel, pero a excepción de Idalys Ortiz (+ 78 kg) no me aportan lo suficiente. Para lo que necesito los varones me favorecen más. Con ellos gané en prácticamente todos los parámetros a la vez que elevé, a tono con lo que me exigen, la efectividad en ataque y la seguridad en defensa”.

A sus casi 31 años Kaliema comenzó verdaderamente a correr con el pie derecho en la arena internacional en el 2015. Desde entonces exhibe balance de 38-26.

Iván Silva: Constituye junto a Idalys Ortiz, el principal referente del judo cubano en la actualidad. Dueño de la tercera posición (4 855 unidades) tanto en el escalafón del orbe como en el olímpico (1 805) acumula 9-4 en lo que va de año. Si bien no se colgó presea alguna en Antalya, acá les dejamos algunas consideraciones suyas:

“Fue un torneo de nivel muy parejo en casi todas las divisiones, ya que todos andan buscando la clasificación olímpica y cada certamen punteable es muy importante.

De mis combates decir que en Tiblisi fueron saliendo las cosas, no estaba en óptimas condiciones, pero fui avanzando. Luego aposté a mi preparación y la mentalidad ganadora para sellar el título. Ese extra que siempre queremos poner, pero que se necesita mucho para lograrlo.

Hicimos bien fuerte el campamento de Georgia, y en una semana no te recuperas para la otra competencia. En el combate que perdí por regla de oro en Antalya me lo sentí un poco, el bajón físico o agotamiento. Fue un pleito cerrado que no pude definir, sin justificaciones.

Tanto Maylin como Kaliema estuvieron súper bien, dominaron ambas competencias y se veían muy superiores a las atletas que habían aquí”, manifestó el matancero de tan solo 23 años, pero a quien respetan en la élite y sus coequiperos ven como experimentado.
Judo a granel. Resultados y Tokio en el colimador. Hasta ahora Cuba marcha con buen paso en su propósito de clasificar a cinco efectivos en cada sexo.