Siria: Amenaza imperialista de invasión total

Siria: Amenaza imperialista de invasión total
Fecha de publicación: 
7 Mayo 2018
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Disminuida por el momento la tensión bélica en la península coreana, crece con inusitada rapidez en Siria, donde hace unos días Estados Unidos reforzó sus posiciones en una zona estratégica del sur, Francia penetró con sus tropas en el norte y Gran Bretaña utilizó drones de moderna generación en ataques de la coalición internacional al servicio del Pentágono.

Las respuestas imperiales a los continuados fracasos de sus mercenarios son variadas y cada vez mayores, como la agresión misilística del 14 de abril pasado, que fue consecuencia de la debacle terrorista en la región de Guta Oriental, al este de Damasco, tomando como pretexto un supuesto ataque químico del ejército sirio a la ciudad de Duma, lo cual nunca fue demostrado.

Este viernes 4, más vehículos blindados de Estados Unidos llegaron a la parte septentrional de Siria, lo cual hace pensar que actuará como en Afganistán, donde, a pesar de continuados anuncios de retiro, permanecen desde el 2001.

Asimismo, otros 200 soldados se sumaron a los 600 existentes en la región de Al Tarif, lo cual desmiente declaraciones del presidente Donald Trump de que EE.UU. replegaría sus efectivos.

Desde Al Tarif, Washington protege a sus terroristas del denominado Ejército Libre Sirio ante el avance del ejército de Damasco, tal como lo hizo con los del Estado Islámico (EI) que lograron salvarse, gracias a que EE.UU. los amparó en su huida hacia el norte.

Mientras Trump amenaza a Rusia con sus "exactos misiles inteligentes”, estos no son utilizados para nada en su propagandizada guerra contra el terrorismo, al que estimula y utiliza convenientemente.

Hace unas semanas Trump dijo que abandonaría Siria porque no pintaban nada allí, ya que el EI estaba derrotado. Acto seguido, sus aliados israelíes y sauditas lamentaron la retirada, en un “show” montado con el socio estadounidense.

Quizás el inquilino de la Casa Blanca se “conmovió” ante tanta petición amiga de quienes, como Israel, extermina paulatinamente a la población palestina de Gaza, en tanto Arabia Saudita hace lo mismo con la población yemenita.

Ahora se sabe que mientras el Ejército Árabe Sirio negociaba con las bandas islamo-fascistas para evacuar la zona y liberar las últimas bolsas de Guta/Duma, los grupos patrocinados por Arabia Saudita rompieron los acuerdos y montaron un ataque químico, al que, contra toda lógica y táctica, se la achacaron a Damasco, todo coordinado para la respuesta de Trump, May y Macron, quien llegó a aventurar una futura invasión de tropas de los tres países, no importa los daños colaterales, es decir a la población civil siria.

LO QUE NO SE MENCIONA

Los medios de desinformación imperialistas callaron, cuando se demostró que no se produjo tal ataque químico y que los “afectados” por tal hecho reconocieron haber sido utilizados por los mercenarios para culpar al gobierno. Tampoco contaron que Israel bombardeó directamente a Irán y a sus asesores que luchan en Siria contra el EI, buscando una respuesta de la nación persa, que no llegó.

Tampoco informan que Philip May, marido de Theresa May y asesor de la Primera Ministra, es accionista de una empresa armamentística (Lockheed Martin), donde hace escasos meses adquirió un mayor porcentaje de sus acciones. Los misiles que Trump calificó como “bonitos y nuevos y elegantes” eran de su firma, con un coste por unidad de un millón de euros. Tras la agresión, su empresa  alcanzó cotizaciones en bolsa de hasta más de ocho puntos.

No mencionan los medios conservadores ni los denominados progresistas que Macron ha enviado a las tropas francesas a “ayudar” a los kurdos, violando la soberanía de un país, sin la aprobación del Parlamento y burlándose de las leyes internacionales. Nada menciona la prensa francesa, ni se ha visto la repulsa de periodistas y autoproclamados intelectuales y expertos en el Medio Oriente, al mencionado ataque sionista contra los asesores iraníes, que causó decenas de muertos, acción que incluyó una estación de bomberos para que no se sofocasen las llamas ni se rescatasen las víctimas. El hecho se produjo horas después de la visita del halcón norteamericano Mike Pompeo a su igual sionista Benjamin Netanyahu, con llamada a Trump incluida.

Tampoco se dice nada de las hazañas “democratizadoras” que están haciendo los “rebeldes moderados” sirios apoyados por la Turquía de la Organización del Tratado del Atlámtico Norte en el cantón de Afrin, donde hasta la fecha estuvieron libres de la guerra y ahora ven como “luchadores por la libertad” apoyados por Occidente por más de siete años, siembran miedo y dolor.

También está el tema de cómo las tropas gubernamentales están liberando el campo de refugiados palestinos de Yarmouk, al sur de Damasco, de las garras del EI y demás grupos reaccionarios, pero Occidente y sobre todo los medios, omiten que en esa lucha miles de combatientes palestinos están ayudando al Ejército sirio en liberar la bolsa takfirie.

No lo cuentan porque saben que la población mundial y en especial la occidental, siente gran simpatía y empatía por la causa palestina y no quieren decir que esta apoya a Damasco y a la causa siria. No quieren mostrar que Palestina y Siria confluyen, que uno es lo otro y viceversa. Son muchas las cosas que omiten, pero lo de esta guerra que va por siete años y medio millón de muertos supera todos los límites.

La intoxicación y desinformación es brutal, el Imperio está haciendo quedar lejos la frase de “no a la guerra” de hace unos años, y lo ha estado consiguiendo.

Por su parte, Rusia, que pensaba comenzar el retiro de sus tropas en diciembre último, lo ha tenido que posponer, mientras reitera que mantiene su apoyo al presidente Bashar al-Assad y al pueblo sirio.

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