Cuba no dejó escapar nada
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Así sucedió en el cierre del Campeonato del Caribe de tenis de mesa para cadetes y juveniles, en el que los de casa acapararon los 14 oros repartidos, el último en la prueba individual de varones menores de 18 años.
Méndez cumplirá 16 en julio próximo, es alumno de la EIDE de Santiago de Cuba y se coronó este sábado en la Ciudad Deportiva sin haber sido monarca nacional.
«Nunca ha ganado un título cubano y ven, ahora es campeón del Caribe», dijo a JIT el orgulloso entrenador Ariolkis Álvarez, feliz por el partido resuelto 4-1 por su alumno en una instalación divida entre los parciales locales y los seguidores del quisqueyano.
Hace apenas unas horas Méndez celebró una primera proeza al eliminar en semifinales a su compatriota Eday Gómez, favorito de muchos, y el “impulso” le alcanzó para registrar ahora parciales de 11-8,11-9,7-11,11-4 y 11-6.
Una de las claves del éxito fue la confianza enseñada en todo momento, sobre todo en un cuarto set enfrentado con inteligencia y cambios de juego corto a la larga distancia, según lo requirió el momento.
«Ese marcó la diferencia, venía de perder el tercero por no hacer técnicamente lo que debía, y no podía repetirlo. Me di cuenta de cuándo necesitaba variar y me salió bien», agregó el jovencito indómito, que habla pausado y se muestra igual de calmado durante los partidos.
Con ese colofón la mayor isla antillana festejó por lo alto, pues antes habían conquistado cetros Letyleidis González, Adrián Pérez y Daniela Fonzeca, todos frente a compañeros de causa.
Daniela, principal figura del sub-18 femenino, se impuso muy rápido a Thalía de Armas y llegó a cuatro títulos para convertirse en la más ganadora del certamen.
Antes se hizo de los oros por equipos, en dobles como pareja de Karla Pérez y en dobles mixtos con Eday.
La categoría sub-15 tuvo como protagonistas a Letyleidis, airosa sobre Estela Crespo, y un Adrián ganador frente a Andy Pupo.
Más allá de los resultados, que fueron excelentes con 41 medallas, la justa sirvió para propiciar juego a los más jóvenes locales, a llamados a establecerse en el alto rendimiento en el ciclo del 2021-2024.
También probó nuevamente a los anfitriiones como organizadores, pues aunque en esta ocasión solo fueron seis los países visitantes igual hubo que montar al detalle el dispositivo de transportación, alimentación y horarios de entrenamientos y competencias.
Como factor negativo señalar que pudo ser mejor la calidad de los involucrados, porque se extrañó ver más exigidos a los de casa, que “pasearon” la distancia por mucho.
República Dominicana fue el de mayor empuje entre los extranjeros con cuatro segundos lugares y dos terceros.
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