Barranquilla 2018: En la línea de lo posible con las pesas al hombro

Levantamiento de pesas y Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla 2018. Dos variables y Cuba insertada en ese panorama, en el que solía regentear sin grandes contratiempos, aun con la incorporación tardía de nuestras féminas, justamente en suelo colombiano, en la versión de Cartagena de Indias 2006.

Entonces, ninguna de nuestras seis representantes pudo escalar el podio de premiaciones, y a la vuelta de ocho años, en Veracruz 2014, Lexis Zulema Diago (+75 kg), una de las pioneras entre damas, se colgó par de bronces en arranque (106 kg) y envión (132).

Ese referente previo nos introduce en la lid de halterofilia de la venidera cita en suelo cafetero, luego de que en el certamen panamericano de la disciplina nuestras escuadras lograran clasificar a 12 efectivos, a razón de siete varones y cinco féminas.

Déjenme intentar explicarles que en el contexto actual de las pesas, incluso en la región centrocaribeña, inscribir a 12 exponentes no significa, ni por asomo, buscar preseas en cada una de las divisiones; ni siquiera en el sector varonil, donde prácticamente éramos dueños absolutos hasta hace poco más de una década.

De hecho, una mirada a la propia Cartagena de Indias arroja que los nuestros dominaron con 13 títulos por ocho los colombianos; mientras en suelo veracruzano, el pulso masculino entre ambas naciones culminó con abrazo a siete vellocinos.

Claro, las halteristas de Colombia se encargaron de consolidar el dominio de su nación con una novena de cetros, para totalizar 16.

Casi con certeza absoluta, teniendo en cuenta su actual poderío y dada su condición de sede (les permite presentar elenco completo en uno y otro sexo), Colombia reinará la justa de halterofilia en Barranquilla, escenario en el cual, al decir de Jorge Luis Barcelán, presidente de la Federación Cubana, nuevamente se premiarán los ejercicios de arranque y envión, por lo que los nuestros estarían optando, potencialmente, por 24 preseas.

Los discípulos de Vicente Gálvez tendrán nuevamente en el multimedallista universal de envión, el pinero Yoelmis Hernández (85 kg), a su principal carta de triunfo y bujía.

El pinero llegará con 32 años a Barranquilla, pero compitió bien en el certamen panamericano clasificatorio, con muestras visibles de recuperación de todas las dolencias que lo aquejaron en las campañas 2015-2016, y un trabajo riguroso de preservación por parte del colectivo médico.

A él deberán sumarse el santiaguero Adriel La O (77 kg) y Víctor Manuel Quiñones (94), como otros sólidos aspirantes al oro. Del resto de los actuales pesistas de la escuadra, Juan Columbié (105) y Olfides Sáez (igualmente 85) se perfilan como los otros contendientes de peso al podio de premiaciones.

Desde hace varios años, y tras la ausencia de hombres realmente competitivos en varias categorías de peso, la estrategia de nuestros gurúes ha sido doblar en aquellas categorías de mayor empuje que posee nuestra armada, fórmula que seguramente se repetirá a la vuelta de unos meses.

Vayamos entonces, antes de chequear el panorama femenil, al rendimiento y ubicación de los hombres en el panamericano de la especialidad celebrado en Guatemala:

62 kg: Dariel Villarreal. Total-269 kg (124-145). Quinto lugar
77 kg: Oscar Reyes. Total-314 kg (142-172). Séptimo
85 kg: Yoelmis Hernández. Total-361 kg (158-203). Primero
           Olfides Sáez. Total-348 kg (155-193). Cuarto
94 kg: Víctor Manuel Quiñones. Total-357 kg (166-191). Tercero
105 kg: Juan Columbié. Total-373 kg (167-206). Tercero
+ 105 kg: Luis Manuel Lauret. Sin arranque y 205 de envión.

El rocoso panorama femenino

Entre las féminas, solo la capitalina Marina Rodríguez (63 kg) posee calidad y kilogramos suficientes en la palanqueta para pelear por posiciones de vanguardia. Marina ostenta la octava plaza olímpica en Río de Janeiro, avalada por 215 kg (94-121), pero no lidió en Guatemala, donde la mejor ubicada resultó ser Yaneysi Merino Toranzo (69 kg), dueña de biatlón de 215 (94-121), para ocupar el quinto escaño.

De las restantes cinco forzudas, ninguna se ubicó más allá de la séptima plaza. Tal panorama constata que las anfitrionas colombianas, las venezolanas, las aztecas y las representantes de República Dominicana, atesoran mejor palmarés, de forma general, que las nuestras.

Como se dice en el argot popular, por ahí andan los truenos de la halterofilia, con muchos kilogramos sobre los hombros y posibilidades que se han limitado para los antillanos en los últimos escenarios, dado el desarrollo creciente de otros países de la región y la inserción tardía de nuestras damas en este deporte, además de que, en más de una década de práctica, no se han materializado todos los dividendos deseados.

Los varones, por su parte, han experimentado un declive, con todas las letras, y esta nueva hornada aún dista o necesita kilometraje suficiente para, a fuerza de alzadas, escalar posiciones.

Toca esperar a ver qué sucederá con nuestros 12 legionarios a la hora cero. Usted, espere otros análisis de las disciplinas en las que Cuba puede sacar mayor partido o botín de preseas en la lid multideportiva cafetera que acogerá Barranquilla, para la cual contamos con 276 clasificados, al momento de redactar estas líneas.