Danske Bladtegnere: Daneses que llegan tarde… y cubanos puntuales (FOTOS)

Danske Bladtegnere: Daneses que llegan tarde… y cubanos puntuales (FOTOS)
Fecha de publicación: 
1 Noviembre 2015
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El vestíbulo del Edificio Dihigo, sede de la Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana, fue anfitrión el sábado último de un encuentro de veintiséis caricaturistas daneses que asistieron a la inauguración de la muestra de treinta dibujantes de aquel país, pero… la apertura se hizo entre cubanos y sin… daneses.

Nada, que como era a las tres de la tarde, quizás los coterráneos del Grupo Dogma 95 andaban buscando a Lola para que no la mataran. Entre humoristas todo es posible: Ares (Arístides Hernández, nuestro siquiatra colectivo) llamó a todos los hoteles, incluso a la embajada, pero no pudo averiguar nada.

Viendo los dibujos, Ares me comentó que nuestro común amigo Ángel Boligán (su contrincante permanente en el mundo de los cartones) le había pedido que «le tirara» un cabo. Él los había conocido y eran gente chévere.

Por eso la Sección de Humor Gráfico, Historieta e Ilustración de la UNEAC y el Departamento de Historia del Arte de la referida facultad se movilizaron para montar las piezas, y es que ¡milagro! llegaron en perfecto estado por correo (no electrónico, del otro).

Para presentar los dibujos, se dice de la exposición «Rasgos daneses»: «Esta es la primera muestra colectiva de Danske Bladtegnere (Ilustradores gráficos daneses) que se realiza en nuestro país. Con una selección de varios de sus mejores dibujantes de prensa, esta exposición nos presenta dibujos de humor general, caricaturas editoriales e ilustraciones de  preciosa factura, que logran establecer una excelente comunicación con nuestro público y que han de ser una manera muy atractiva de conocer más sobre la cultura de Dinamarca.

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«La presencia de varios de sus autores es, para el público visitante y en especial para los dibujantes cubanos, una excelente oportunidad para intercambiar experiencias, descubrir puntos de contacto y diferencias en el abordaje de diversas temáticas, así como conocer personalmente a creadores que admiramos desde la distancia».

Esto último se cumplió esa tarde de sábado: luego de ver, retratarnos, con y sin dibujos, pasamos a un área refrigerada, y allí nos topamos con unos vasitos y… refresco, brindamos y empezamos a hablar de… cualquier cosa. Cada vez que llegaba alguien, anunciaban a los daneses, hasta que Ares vino y dijo: «sí, ahí están, vamos a inaugurar otra vez».

El también vicepresidente de la UNEAC dio la bienvenida y presentó a cada uno, empezando por el Dr. Rogelio Rodríguez Coronel, decano de la Facultad; Adán; Jape; Zardoyas; Falco y otros creadores más.

Lars Refn, presidente de los caricaturistas de Dinamarca, habló en español del porqué de su visita, y calificó a Cuba como un país impresionante. Dijo que les interesaba entrar en contacto con colegas cubanos y que por lo que sabían, tendrían motivos para alegrarse del viaje.

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Luego de estas palabras, Ares expresó, con su mejor sonrisa, que él traduciría al danés lo que había expresado Lars. Tal frase rompió toda formalidad. Se mezclaron unos y otros, comenzó el intercambio de libros, de periódicos, de revistas, y se hicieron algunas caricaturas personales. Y, por una donación de los europeos, hubo refrescos, vino, ron… sin que se llenara el río. Ah, nunca supe por qué los daneses llegaron tarde y los cubanos, temprano.

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