Marta Rojas, viviendo en sus historias

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Marta Rojas, viviendo en sus historias
Fecha de publicación: 
4 Octubre 2021
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La destacada escritora y periodista falleció este lunes en La Habana.

Lo de Marta Rojas era narrar, con entusiasmo, con placer, haciendo gala de una memoria privilegiada; lo de Marta Rojas era conversar, escribir, dejar testimonio. Era como si atesorara muchas historias y tuviera la necesidad imperiosa de compartirlas. Siempre estaba dispuesta al diálago. Y si el auditorio era joven, se animaba mucho más. Su energía era contagiosa, sus ganas de vivir. Llegaba a los lugares y lo movilizaba todo a su alrededor. Marta era un espíritu inquieto. "Uno puede perder muchas cosas con los años, es ley de la vida; pero no debería perder la curiosidad, la sonrisa y la capacidad de querer" —le confesó un día a este cronista.

Un día, antes de que demostrara todas sus credenciales, Alejo Carpentier la calificó como "una novelista por instinto". Se refería a esa capacidad de enhebrar peripecias, con ritmo y vuelo, notable en sus reportajes. Con los años confirmó con creces la valoración del célebre escritor. Esa fuerza narrativa de sus trabajos periodísticos se consolidó en su novelística. "Puedo admitir que a alguien no le interesen las historias que cuento, pero nunca me daré el lujo de aburrir a mis lectores. Una novela tiene que tener sustancia, pero también condimento" —decía.

A ella le interesó siempre la historia. La gran historia, la de las naciones, la de los grandes acontecimientos y personajes, la gesta de los pueblos. Y la historia más íntima, la de las pequeñas pasiones y las iniciativas más o menos personales. "La segunda —afirmaba— suele ser  motor de la primera. A un periodista le corresponde encontrar esos puentes, esos móviles".

Ella era para muchos "la periodista del Moncada". Hubo coincidencia en esa circunstancia, los juegos del destino: estar en un lugar y a una hora. Pero no basta. Hacen falta determinación, coraje, sentido común, capacidades intelectuales, sensibilidad, vocación de servicio... A ella les sobraban. Sus páginas sobre el asalto y sus consecuencias, sobre el proceso judicial, sobre los protagonistas, su valoraciones posteriores sobre la significación del acontecimiento... devinieron importantes documentos para la historiografía nacional.

Y no solo el Moncada. Otro de los hitos de su gran trayectoria fue su trabajo en el Vietnam de la guerra y la Revolución, una expericiencia que la marcó para siempre. "En Vietnam abrí los ojos a muchas de las cosas de la vida a las que antes prestaba poca atención. Y me reafirmé en mi confianza en el ser humano y su capacidad de resistencia".

Heroína del Trabajo de la República de Cuba, Premio Nacional de Periodismo José Martí, Marta Rojas era un referente indiscutible del periodismo cubano. Ella lo sabía, pero no se regodeaba en tontas vanidades. "A mí lo que me corresponde es seguir entregando, mientras tenga fuerzas. Y yo siempre tengo fuerzas. No les hago caso a mis dolores. Yo soy joven porque me siento joven. Y la juventud, de alguna forma, puede ser también una elección".  

Comentarios

¡¡Tremenda mujer¡¡ Un ser humano especial. Alguien a quien tener de referente. Gracias Marta.
jpvidal@nauta.cu
Marta descansa en paz. Gracias por todos. Para nosotros nunca muerta solamente en un estado de descanso. Mis condolencias a todos los familiares y amistades de la gran dama Marta. Siempre con nosotros.
majihabana@gmail.com

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