Celebran en Colombia pase a semifinal de Copa América Centenario

La juerga terminó avanzada la madrugada, con una sola pregunta flotando en el ambiente del perenne frio andino: Chile o México?, el próximo rival que tendría Colombia en la semifinal de la Copa América Centenario de fútbol.

El encuentro realizado en Nueva Jersey terminó avanzada la noche, todos con un nudo en la garganta a la espera de que se ejecutara la serie de penales que terminó ganando el tricolor por 4-2, tras un tiempo reglamentario carente de goles.

La euforia estalló con un solo ídolo, David Ospina, el guardameta del club Arsenal británico, a quien los periodistas del emporio radiotelevisivo RCN bautizaron la víspera con el nombre de San David.

Con su madurez futbolística de 27 años cumplidos, Ospina le ganó la faena bajo los tres palos al portero inca Pedro Gallese.

Demostró sus dotes de felino, los cuales exhibió en el estadio MetLife de East Rutherford, cuando atajó el cobro de Miguel Trauco, flotando horizontal y usando como arma auxiliar el pie derecho, mientras cubría el arco de punta a punta.

Se había consumido el tiempo de un intenso encuentro trabado en el medio campo, carente de creatividad goleadora y de buenos disparos. Fue el momento que aprovecharon los cafeteros con mayor serenidad ante el incierto arco para alcanzar el triunfo con cuatro magistrales penales.

La selección colombiana vuelve ahora a ubicarse entre los mejores cuatro equipos del hemisferio occidental en 12 años, mientras el director técnico rival, el argentino Ricardo "El Tigre" Gareca, un viejo conocido del fútbol colombiano, ya ubica al tricolor como el favorito para llevarse esta Copa única.

El tiempo regular le negó al capitán James Rodríguez (Número 10 del Real Madrid) dos oportunidades de gol, mientras el impetuoso delantero Carlos Bacca, del Milán italiano, no encontraba la mejor noche con visible dificultad de molestia en una de sus piernas.

Con dos victorias en la serie eliminatoria A favorables, que pudieron ser tres sí el técnico José Néstor Pékerman no hubiera subestimado a Costa Rica -jugándole con el banco-, Colombia espera ahora el desenlace del duelo entre aztecas y australes de hoy en el coloso de Santa Clara, el Levi's Stadium, que desbordaran más de 70 mil mexicanos.

Así las cosas, Colombia retada por la curiosidad de su más próximo oponente, volverá a quedar prendida esta noche ante los televisores hasta languidezca el sábado.

Sabrá entonces si deberá toparse en la semifinal el próximo miércoles con un elenco sudamericano u otro verde-rojo-blanco de más al norte, que está dirigido por un estratega colombiano: Juan Carlos Osorio.