Cuba en suspenso por comparecencia de Raúl Castro en TV

 En la panadería, la trabajadora que despacha comentaba con la señora que compraba: “Me alegraría mucho, sobre todo por las familias de esos muchachos que llevan tantos años esperando”!

En el quiosco de enfrente, donde se venden viandas, mientras el vendedor pesaba tomates decía en voz alta para quien quisiera escucharlo: “yo lo decía, que San Lázaro no me iba a fallar, hoy va a ser un día grande”.

Por la calle, una pareja conversaba: “me llamó mi prima que lo oyó por Telesur: Liberaron a  Alan Gross, y dicen, nadie lo ha confirmado, que yo sepa, que a los tres héroes también”. Su interlocutor le respondía a la mujer: “Que sí, que en su cuenta de Twitter René Gonzáles lo puso hace un rato, mi padre me avisó por un SMS. Pero hasta que lo diga Raúl, ahora a las 12:00, no se sabe de verdad”.

Frente a la carnicería, donde sorpresivamente llegó pescado por pollo y una colita aguarda para chocar con las escamas, un trío de ancianos especulaba jaba en mano: “Obama también va a hablar a las 12:00, simultáneo con Raúl. ¿Se restablecerán las relaciones diplomáticas?”. “Esto se está poniendo bueno, Ismael, a lo mejor tienes a tu nieto celebrando el año nuevo contigo, di tú.”

Y la gente dice. Es el tema de todos. Pero sobre todo escucha y aguarda, expectante, esperanzada por lo que de bueno puede traer este día para muchos. (V.R)