La Florida: Su podrido mundo político

La Florida: Su podrido mundo político
Fecha de publicación: 
23 Agosto 2014
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La Florida exhibe dos virtuales candidatos: el actual titular, Rick Scott, republicano, y el demócrata Charlie Crist.

El primero anunció este jueves que, si gana los comicios, aumentaría el dinero promedio asignado para cada estudiante de su enseñanza pública.

Lo dijo a escasos días de que Crist prometiese fortalecer los fondos del mismo sistema docente.

Una reportera del periódico Herald-Times, Kathleen McGrory, informó este viernes que el actual gobernador floridano divulgó un plan destinado a incrementar “a una altura record” los gastos escolares de 2015.

La periodista subrayó criterios de especialistas cuando describieron lo dicho por Scott como una jugada de año electoral.

Pero llamó aún más la atención respecto a un significativo detalle: lo inusual del momento en que lo hizo.

Con anterioridad, indicó McGrory, Scott anunciaba sus proyectos presupuestarios semanas antes de las sesiones parlamentarias, pero ahora sus legisladores no regresarán a la capital, Tallahassee, hasta dentro de seis meses.

Joanne McCall, vicepresidente del Sindicato de Maestros Estatales,  que apoya a Crist, explicó la razón de tal comportamiento de Scott:

“Creemos que él puede leer las encuestas como nosotros, y considera que esto le dará una ventaja entre padres y maestros”.

“Pero nosotros”, -agregó-   “tenemos buena memoria”, insinuando así los machetazos que ha dado a sus fondos.

Crist la semana pasada recorrió su territorio y entonces echó en cara  los 1 300 millones de dólares que hace tres años Scott eliminó a los gastos educacionales.

Prometió remendar esa disposición, aunque  sin explicar la forma de hacerlo ni brindar cifras.

Especialistas recordaron que en 2007 los gastos docentes alcanzaron allí altas cantidades, pero al año siguiente, cuando gateaba la crisis económica, Scott les disminuyó 800 millones de dólares.

Ahora el aspirante a la reelección se jacta de que su presupuesto educacional 2014-15, será el mayor en la historia del estado.                      

No obstante, los números contenidos en las estadísticas    revelan que los gastos por estudiante continuarían siendo menores que en 2007 y 2008.

El drama de Rick Scott, como el de tantos políticos estadounidenses, radica en que agotaron su discurso y su credibilidad.

Jugar con la educación en su mundo podrido de la política así lo corrobora hasta la saciedad.

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