Hanser García y Pedro Medel: entre ambiciones, marcas… quimeras

El primero avalado por el séptimo escaño olímpico, topes nacionales de 22.15 y 48.04 en 50 y 100 metros estilo libre respectivamente, y esa competitividad extrema en las piscinas, nadando siempre como si en cada tramo le fuera la vida. También en su insaciable sed de triunfo pesa el hecho de que en poco más de tres años dedicado por completo a la natación su ascenso a la elite universal ha sido impresionante.

Medel, marcado por el fantasma de poder rebajar los dos minutos en los 200 metros espalda, esa que según confiesa y amparado en la capacidad aerobia y la resistencia como principales recursos, constituye su distancia preferida.

Ambos nadaron en la XXVI copa Marcelo Salado que tuvo por escenario la pileta del coliseo de la Ciudad Deportiva, pues el Complejo Baraguá está cerrado, tras el derrumbe de su techo, pero eso… es madera para otro trabajo.

Los dos tienen su ritual antes de lanzarse al agua: El “pollo”, mucho más mediático, devorado por las miradas de todos, sus habituales palmadas en el pecho antes de tirarse a cada cruzada acuática, y casi siempre con su sobretodo rojo y un pullover azul con el símbolo de Súperman enfrente y un Hanser García al dorso... quizás así se sienta o aspire a convertirse, en una especie de tritón cubano sobrenatural.

Condición que, al menos si de rescatar preseas bajo los cinco aros se trata exhiben los otrora estelares espaldistas Rodolfo Falcón (54.98 segundos) y Neisser Bent (55.02), plata y bronce respectivamente en Atlanta 1996.

Medel da constantes paseos por los alrededores de la piscina, silencioso como una pantera acechando a su presa en medio de una noche tenebrosa, buscando concentración.

Luego de coronarse, dos veces Hanser sin la más mínima oposición, y tres Medel con la respiración de Armando Barreras a sus espaldas en cada tramo, ambos decidieron dar algunos detalles de su estado actual para Cubasí:

Hanser: “A Barcelona iréen busca de mejorar mi séptimo puesto de Londres, no me gusta hacer pronósticos, pero tengo ambiciones. Acá llegamos cargados debido a las interrupciones relacionadas con la actual temporada invernal y problemas con las piscinas disponibles para entrenar. Normalmente la semana previa a un evento fuerte nado entre 10 y 15 kilómetros, a esta llegué con 34, sin realizar puesta en forma, entonces ese volumen tras varios días de intensidad se tradujo en cansancio. De cualquier manera estoy contento con el resultado, fue fiel a lo proyectado por mi entrenadora María Luisa Mojarrieta (49.3-49.4) a pesar de no superar el 48.86 del martes.”

Medel: “Bajar de los dos minutos es importante. Todos se preguntan cuando lo haré. Si por mí fuera nadaría los 200 metros en 1:56… Sucede que debo mejorar mis tiempos y frecuencia en cada tramo de 50 metros, algo que depende de la progresión de mi capacidad láctica. Esta tercera experiencia en el circuito Mare Nostrum, (también incursionará el mariposista Alex Hernández) deberá ser provechosa en ese sentido”, sentenció el granmense finalista en el hectómetro en los XVI Panamericanos de Guadalajara y quien se impuso el año pasado en Canet con 2:00.34.

¿Técnicamente…?

Hanser: “La técnica es una sola, no varía. La mía no es la mejor ni mucho menos. Todos conocen mis deficiencias con el delfín y la vuelta. Sencillamente cambian los estilos, el mío es salir a bracear y patear. Es mi guerra contra el agua, el cronómetro y los rivales.”

Medel: “No soy muy técnico, debo mejorar la reacción en la salida y el halón final para el toque, pero no son deficiencias marcadas.”

Volvemos a rituales y circunstancias. A Hanser esa condición y velocidad endemoniada como delantero en el polo acuático le bifurcaron para bien el camino hacia la natación; Medel hacía pruebas combinadas y quiso el destino que con 14 abriles lo probaran en los Juegos Escolares de Cienfuegos 2006. Entonces detuvo los relojes en 1:02 y nunca más combinó estilos oficialmente.

El primero llegará a Europa con un arura especial, en la mira dd todos y ansiando escamotearle una presea en la ciudad Condal a tantos monstruos de su especialidad, comandados en la actual temporada por el as en la capital británica, el estadounidense Nathan Adrian (48.32), el australiano James Magnusen (48.38), y el belga Pieter Timmers (48.76); Medel puede incluso, de no realizar cronos de relieve, pasar desapercibido y echar a su bolsa otro año gris si de resultados se trata. Por ahora, esperar seis semanas para su posible despegue en el viejo Continente… y luego otras tantas hasta la cita universal.